viernes, 19 de julio de 2013

La legión de los hombres sin alma (1932) de Victor Halperin



La parejita (John Harron y Madge Bellamy)
La verdad me produce profunda lástima ver cómo la carrera de Bela Lugosi se fue hundiendo poco a poco y se vio obligado a participar en auténticos bodrios infumables a lo largo de los años cuarenta y cincuenta, viendo cómo durante los treinta se había convertido en toda una gran figura del terror. Efectivamente Bela Lugosi no era un excelente actor, pero hay que decir que tenía un carisma inigualable, sus gestos, sus movimientos crearon escuela y lo posicionaron, con el pasar de los años y merecidamente, en un milenario e inmortal icono del terror. Con "Drácula" y con este film, lo dejó bien claro, Bela Lugosi había nacido para el terror. La película cuenta como una joven pareja de enamorados (nunca faltan en films de esta época), Neil (John Harron) y Madeleine (Madge Bellamy), viajan a Haití invitados por el Sr. Charles Beaumont (Robert Frazer), un tipo muy raro que desea ciegamente a la chica.
 
A éste hace unos cuantos años que no le da el Sol
 
Un alojamiento aterrador
Es hasta tal punto el deseo, que este tipo acude a un ser siniestro (con un aspecto parecido al mismísimo diablo), Legendre (Bela Lugosi), el cual realiza malévolos conjuros. Lo que Beaumont pretende es que mediante estos hechizos, le ayude a conseguir a Madeleine. Legendre acepta, pero a cambio de un alto precio, y es que un tipo que es capaz de hacer que los muertos resuciten y controlarlos a su antojo, no puede ser de fiar. Tenemos una película de atmósfera realmente tenebrosa, de historia simple pero entretenida, un film emblemático no cabe duda. Obviamente si algo es especialmente llamativo es el propio Bela Lugosi que hace un papel escalofriante y digno de recordar. La película es una discreta joya del terror de aquella época y como tal merece ser la pena visionada.

Lengendre (Bela Lugosi)

Bajo el control de Lengendre
Fue además la primera película de zombies que se ha hecho en la historia del cine, pero obviamente estos zombies no son como los de ahora, en este film veremos como los muertos vivientes son seres autómatas resucitados por medio de magia negra, que siguen las órdenes de una mente dominante, nada que ver con los zombies devoradores de carne que Romero haría populares en 1968 en "La noche de los muertos vivientes". Es curioso ver hoy en día cómo ha ido evolucionando la figura de los zombies, por eso acostumbrados a esos todoterrenos dopados de las pelis de hoy en día, si hasta los zombies de Romero parecen descafeinados, los de "La legión de los hombres sin alma" ya ni hablar, pero por eso insisto que hay que saber ver el film como testimonio del terror de aquella época. Me parece una película digna de rememorar, un clásico del género e imprescindible para amantes de éste, por su valor histórico y por la presencia del maravilloso Bela Lugosi en sus mejores tiempos, en los que de verdad era toda una figura respetable y admirable del terror. Como curiosidad, es que fue rememorada por el cantante Rob Zombie (antes de meterse a director de bazofias cinematográficas), que llamó al grupo musical que formó desde finales de los ochenta hasta finales de los noventa, "White Zombie" (el título original del film) en honor a esta película.

Los muertos caminan

*MI MOMENTO FAVORITO: en sí todas las apariciones del personaje de Bela Lugosi, cuando a través de un curioso gesto con sus manos consigue controlar la mente de todo aquél que se propone. 

Un gesto diabólico

No hay comentarios:

Publicar un comentario