viernes, 13 de septiembre de 2013

Muñeco diabólico 2 (1990) de John Lafia



Chucky siendo reconstruído
Yo soy de los que opinan que las segundas partes por lo general casi nunca están a la altura de la película original. Pero de vez en cuando te encuentras con excepciones tan geniales como ésta. La segunda película de "Muñeco diabólico" es con diferencia, en mi opinión, la mejor de toda la saga de Chucky. El hecho del porqué Chucky regresa resulta confuso y en sí no tiene una explicación coherente, pero realmente ¿qué más nos no da? En todas las sagas de asesinos famosos (véase Jason, Freddy Krueger,...), la razón por la que vuelven secuela tras secuela es lo de menos, lo que realmente importa es que ofrezcan un espectáculo que merezca la pena para el deleite de sus fans y desde luego "Muñeco diabólico 2" aporta un excelente resultado. 

Chucky vuelve a la vida
 
El pequeño Andy Barclair (Alex Vincent), dos años
después de su primer encuentro con Chucky
La cuestión es que Chucky, el muñeco Good Guy más popular, es reconstruído, tiene peor genio y más ansias que nunca de abandonar su cuerpo actual e introducir su alma en el cuerpo del pequeño Andy Barclair (de nuevo será interpretado por Alex Vincent). Ahora Andy vive con una familia adoptiva, ¡ojo al nombre de éstos!, los Simpsons, un matrimonio muy remilgado cuya función será intentar que Andy supere el trauma del muñeco. La mujer (Jenny Agutter) recibirá con bastantes ganas al pequeño, mientras que el marido (Gerrit Graham) le tiene un poco de asco, es un amargado y nunca llegará a mostrarle el mínimo gesto de afecto. Por supuesto Chucky volverá a aparecerse en la vida del niño y a partir de entonces las cosas se complicarán para él. Obviamente todo el mundo sigue sin creerlo, mientras Chucky va cargándose a todo aquél que le toque las pelotas. 

Andy con sus padres adoptivos (Gerrit Graham y Jenny Agutter)
 
Chucky y Andy juntos otra vez
Lo bueno es que en esta ocasión Andy contará con una aliada, su hermanastra Kyle (Christine Elise), que será quien lo ayude a desembarazarse del muñeco asesino. En sí la premisa que nos ofrecen podría parecer casi idéntica que la de la primera, no obstante esta secuela posee una serie de cualidades que superan a su antecesora. Para empezar ésta asienta las características que convirtieron al personaje de Chucky en un mito del cine de terror, es más perverso, más malo, más sanguinario y mucho más divertido, irónico y socarrón. Así mismo mientras que la primera tardaba demasiado en introducir al muñeco en sí, la segunda va directa al grano y éste entra en acción enseguida, haciendo que el nivel de entretenimiento sea aún mayor. 

Las muertes no se harán esperar

Kyle (Christine Elise) se convertirá en una digna oponente de Chucky
A su vez los ataques de éste son menos edulcorados, son más brutales, más perversos y hay un número mayor de muertes. Los efectos especiales también están mejor, se consigue dar a Chucky una sensación de realismo asombrosa y fascinante. Lo que mola es que lejos de verse como una secuela repetitiva se apunta innumerables tantos aportando momentos verdaderamente geniales y más macabros (como aquél en el que Chucky se arranca una mano y se pone la hoja de un cuchillo en su lugar o en conjunto el desenlace en la fábrica de juguetes). Hay que destacar que rompe por completo en lo referido al aspecto visual con la primera, mientras que ésta presentaba un ambiente más claustrofóbico, con una fotografía oscura, ésta todo lo contrario, nos muestran unos escenarios coloristas, amplios (véase el nombrado de la fábrica de juguetes), que desde mi punto de vista también le viene de fábula al tono del film.

Chucky ataca a Kyle

Ojos que no ven ...
Aumentan también los toques de humor negro faltoso de Chucky, que se reserva perlas verdaderamente divertidas. En el apartado de actores, repite el personaje del niño de la primera, ahora más espabilado, acompañado por nuevos rostros que cumplen muy bien sus respectivos roles (en esta ocasión me gustaría destacar a la joven Christine Elise, como la joven Kyle, una excelente heroína que plantará cara a Chucky). La historia no tiene altibajos, tiene un gran ritmo, entretiene y distrae y además te brinda algún que otro sustillo muy bien traído. En definitiva, que es una película genial, la mejor de la saga, con una calidad excelente, muy buena realización, efectos, banda sonora, un Chucky más malvado que brinda mejores momentos (muchos para el recuerdo), hay más muertes, hay más sangre, vamos que se come a la primera. Yo la adoro y digo sin ningún reparo que es mi film favorito de la saga del muñeco diabólico.

¡Cuidado, que Chucky ataca!

*MI MOMENTO FAVORITO: una de las escenas más famosas y recordadas de la saga de "Muñeco diabólico". Aquel momento en el que Chucky elimina a la severa profesora de Andy, la Srta. Kettlewell (Beth Grant), propinándole varios golpes con una regla. 

''Te has portado muy mal Srta. Kettlewell"

No hay comentarios:

Publicar un comentario