San Valentín sangriento (1981) de George Mihalka

Haciendo preparativos para el baile de San Valentín

Bueno, sobre este slasher ochentero hay varias cuestiones que comentar. Recuerdo haberlo visto hace ya un porrón de años, en el canal Calle 13, y la verdad me decepcionó. El resultado no le hacía honor a su título, porque la verdad de sangre poca, poca, casi nula. En resumidas cuentas, me pareció un film distraído, pero muy descafeinado y light. No obstante, años después (y gracias a Internet, todo sea dicho), me enteré que el film había sido brutalmente mutilado en la sala de montaje por culpa de la censura. Y por ahí buscando y rebuscando, logré localizar una versión UNCUT (o sea, íntegra o sin cortes) y hay que decir que la cosa mejora enormemente. "San Valentín sangriento", sin dudas era una película bastante cruel, sangrienta y con excelentes escenas gore. Es increíble ver cómo le restaron calidad a este gran slasher eliminándole todas las escenas de muertes grotescas que posee, algo verdaderamente vergonzoso. Por suerte, a día de hoy es posible disfrutar del film tal y como fue concebido y es el que procederé a comentar. 

El asesino Harry Warden vuelve buscando venganza

Feliz San Valentín, de todo corazón

"San Valentín sangriento" nos sitúa en un pequeño pueblo que tiene un miedo atroz a la llegada del 14 de Febrero. Veinte años atrás, un minero psicótico, asesinó sangrientamente a los dos capataces de la mina cercana a dicho pueblo, como venganza por haberlo dejado sepultado bajo los escombros tras una explosión. El tipo arrancó los corazones de sus víctimas y los dejó como reclamo en cajas de bombones con forma de corazón, advirtiendo a todos de que si volvían a celebrar el día de San Valentín, él volvería con su pico y haría otra consecuente escabechina. Pero, ahora, transcurridas dos décadas desde esta masacre, a un grupo de jóvenes que se la suda por completo el pasado, les da por montarse su propia fiestecita del día de los enamorados. ¿Hace falta que concrete lo que va a pasar?

Recién salida de la lavadora

¿No querías San Valentín? Pues toma San Valentín

La película, no lo vamos a negar, es típica, sí. Lo era ya incluso por aquella época, como el porrón de slashers que aprovecharon la moda de "Viernes 13" que tanto lo petó a principios de los ochenta, pero eso poco importa. Los fans de los slashers (entre los que me incluyo) no pedimos más. Tenemos un grupo de jóvenes (en esta película no tan jóvenes en apariencia) con las hormonas revueltas, una fecha señalada (en este caso el día de los enamorados, oh yeah) y un asesino (enmascarado si puede ser) que los va matando. Lo importante en un slasher como ya he dicho otras veces, no es el tema, sino el cómo está hecho y para que sea bueno debe haber implicación por parte del director. En este caso, no cabe duda, la hay, brindándonos una muy notable factura técnica con una buena ambientación (el escenario es una mina subterránea que pone los pelos de punta con sus pasillos larguísimos y oscuros y su sensación de claustrofobia), unos actores que se lo tomen en serio y que no sobreactúen demasiado (los tenemos, para lo limitados que son los personajes en los slashers cada actor cumple muy bien con su determinado rol), un asesino que imponga (en este caso un minero armado con un pico, cuyo aspecto es verdaderamente acojonante) y que sea cruel y sanguinario (la sangre está servida, el psycho-killer no se anda por las ramas; matar, mata lo suyo), muertes imaginativas y grotescas (la película ofrece un buen puñado de ellas, eso sí hay ver la versión sin cortes de la que he hablado al comienzo, ya que la versión del DVD en España es la censurada y están todas las escenas de sangre cortadas) y una historia amena y entretenida (en este caso el film no decae, tiene buen ritmo, tensión y se deja ver perfectamente). 

La versión sin censura no escatima en sangre y gore

Este grupito decide ir a darse una vueltecita por la mina

La expongo como claro caso de lo mucho que la censura puede joder un proyecto y restarle calidad por un tubo. Por lo que he podido leer por ahí, la razón por la que sufrió semejante sucesión de cortes en montaje, fue que su estreno coincidió muy cercano a la muerte de John Lennon, una época en la que cuatro subnormales moralistas decidieron proclamar que la violencia en el cine era muy pero que muy mala y que casi con toda seguridad sería potenciadora de la aparición de futuros psicópatas enfurecidos, por lo tanto debía de ser lo más posiblemente edulcorada. En fin, por donde les da a los cuatro imbéciles que cortan el bacalao en el terreno de la distribución cinematográfica. En resumidas cuentas, para los amantes de los slashers y para los que sus gustos cinéfilos no sean tan ñoños, repugnantes y sofisticados (que no admiren actitudes artísticas más allá de los Fellini, los Bergman, los Von Trier o los Haneke) esta película les gustará casi seguro. Yo creo que es una nostálgica y fantástica muestra del buen slasher que sabían hacer en los ochenta. A mí personalmente me gusta mucho, me parece una de las mejores explotaciones de "Viernes 13" que se hicieron durante la época de mayor apogeo de este tipo de films.

Esto sí que es ir directo al corazón

*MI MOMENTO FAVORITO: uno de los asesinatos más perjudicados en la versión original estrenada en 1981. Se trata del de una joven, Sylvia (Helene Udy), que será sorprendida por el minero asesino quien, sin ningún reparo, acabará con la vida de la chica hundiéndole una tubería por la nuca y dejándola colgada cual pata de jamón. En la versión sin censurar, puede verse la escena con todo lujo de detalles, presentando unos efectos de maquillaje verdaderamente cojonudos y dignos de admirar. No tenéis más que comprobar ambas versiones para ver cómo pierde la censurada frente a la íntegra, mutilaron más la escena, que Harry Warden a esta pobre chica. 

¡Con la de problemas que te habrías ahorrado si te hubieses quedado en casita!