martes, 10 de diciembre de 2013

Coto de caza (1983) de Jorge Grau



Adela (Assumpta Serna) representando la Ley
Y continúo la línea navideña, con un film patrio, para mí, espectacular y lamentablemente víctima del más absoluto de los olvidos. "Coto de caza" nos trae una visión demoledora de la Navidad que atenta contra todo positivismo inherente a dicha festividad, realmente el hecho de que se desarrolle en esta época, de primeras puede parecer irrelevante, pero creedme que ello ayuda a potenciar su nivel de dramatismo y crueldad. La película está dirigida por Jorge Grau, un catalán que si bien puse a parir su película "No profanar el sueño de los muertos", aquí tengo que aplaudir su trabajo, porque ha conseguido una película de impacto súbito y, repito, que injustamente ha sido pasto de la obsolescencia. El film está situado en esa vertiente cinematográfica que se desarrolló tanto en España durante la época de la transición, marcada por el fin de la dictadura, la cual se denominó "cine quinqui". Las características de este cine es que sus personajes protagonistas solían ser indivuos marginales, con poco coco y extremadamente propensos a la utilización de la violencia, en resumidas cuentas criminales pandilleros. Algunas de las películas más representativas de este tipo de cine son "Perros callejeros", "Navajeros" o "Colegas", las cuales se convirtieron en reflejo de una realidad bastante desconocida en el terreno cinematográfico, hasta ese periodo (finales de los setenta y principios de los ochenta) en el que se fueron films bastante populares en taquilla en nuestro país . 

Adela con su familia

El anuncio de Codorniu anuncia la llegada de la Navidad
Pues bien "Coto de caza" se sitúa dentro de dicha vertiente "quinqui" y a su vez, resulta un cruce con el cine exploitation, también muy popular en la época, siguiendo en ciertos pasajes la línea impuesta por películas como "La última caza a la izquierda" o "La violencia del sexo". La historia nos relata el acoso que sufrirá una moralista abogada, Adela (interpretada maravillosamente por la actriz Asumpta Serna, la Pantumaca en la serie "Aquí no hay quien viva") y su familia, por parte de una banda de violentos y crueles pandilleros, cuyo cabecilla es el sádico Mauri (Luis Hostalot). Una noche, estos criminales irrumpen en el retirado chalet de Adela y en un forcejeo, asesinan a su marido al dispararle a bocajarro. Resulta que después de este incidente, los pandilleros huyen del lugar, pero se dejan atrás al hermano menor de Mauri, Juanito, que sufre un ataque epiléptico y es capturado por la policía. 

El Mauri (Luis Hostalot), un quincarra de mucho cuidado, y compañía

El chaval sufre lo suyo en la cárcel, incluso es acosado por un cura claramente homosexual que le hace insinuaciones muy indecentes para con su hábito. La cosa empeorará cuando Juanito acabe muriendo en prisión, será entonces cuando Mauri se empeñará en descargar su ira contra Adela y los dos hijos pequeños de ésta. La abogada, ferviente defensora de aplicar siempre las leyes para castigar todo tipo de delito, antes que la utilización de la fuerza o del ojo por ojo, se encontrará en una difícil situación, puesto que, se dará cuenta de que para salvar su vida y la de sus hijos, llegará un momento en que no habrá más remedio que responder a la violencia con más violencia.

Adela y su familia son asaltados en su chalet por el Mauri y su panda

El marido de Adela resulta muerto
Pues bien, si he dicho que la película me parece magnífica, no lo hago en base a su calidad técnica. Lamentablemente no ha sido editada en DVD, por lo tanto la única copia que dispongo de ella es un ripeo de un chungo VHS con más años que la tana, así que su calidad visual se ve bastante perjudicada como para producir un juicio a su favor. No obstante el valor del film radica en otro sentido. Por un lado en su marcada crítica social bien presente, bastante similar a la reflejado en la ya mencionada "La última casa a la izquierda"; en la que observaremos como una persona que se hace llamar moralista y que cree que el sistema la protege de todo mal, acabará por declinar sus creencias para responder con efectiva agresividad a un enemigo que no se anda con medias tintas, y que se apoya en la violencia y el crimen para solucionar cualquier conflicto. Las palabras y las leyes en resumidas cuentas no sirven de nada, y cuando se trata de sobrevivir, toda medida desesperada es justificable, por muy sangrienta y atroz que resulte y por muy puritanos y correctos que nos consideremos; el ser humano a fin de cuentas, es un animal y además el único que es capaz de hacer daño a sabiendas y por mero gusto. 

El hermano del Mauri, Juanito, acaba preso

Por otro, si hay algo que me ha impactado de la película, es esa vorágine de violencia que presenta. Estamos ante un film, al que yo denomino, con un par de cojones. Como los malvados de la historia, sus realizadores no se andaron con medias tintas y optaron por ser gráficos en todos los sentidos. Sus quince últimos minutos, en realidad el punto álgido de la película, presentan una de las escenas más hirientes y sofocantes que he presenciado en mucho tiempo, y en una película de estas características; que incluye una violación bastante explícita, una agresión sexual atroz, maltrato a niños y una esperada y ansiada venganza que rematará el film dejándonos con una casi segura sensación de malestar. 

Un cura pervertido se quiere aprovechar de Juanito

El Mauri y un compinche intimidan a Adela
Siempre he sostenido que me parece admirable comprobar trabajos cinematográficos, cuyos autores son tajantes y directos en las escenas cumbres y que no se cortan un pelo si tienen que mostrar cualquier tipo de barbaridad con total impunidad; sobre todo cuando se hace necesaria la inclusión en el argumento, como en este caso, de algún elemento violento (siempre y cuando por supuesto su realización sea enteramente ficticia y no conlleve daño real contra cualquier ser vivo; por ello lo de que sea ficción). Una película como "Coto de caza" sería muy inviable hoy en día en el cine más convencional (ya en el underground es otra cosa); no creo que hubiese un realizador actual con los huevazos de incluir una escena de violencia tan gráfica como la presente en este film en su tramo final; por eso de ese incómodo edulcoramiento de los proyectos cinematográficos de hoy en día y ese excesivo purismo de suavizar todo lo expuesto en una pantalla a un público mayoritario. Por eso adoro la mala baba de este tipo de producciones de esta época, porque por lo menos se dejaba ver la osadía y el coraje de muchos de sus realizadores. 

Juanito acaba muerto en la cárcel

La familia a punto de vivir una infernal Nochebuena
Por lo demás comentar también que posee increibles actuaciones, sobre todo son destacables, la de la prota Assumpta Serna, que está maravillosa y decir que además mostró muchas agallas de ofrecerse a rodar la escena en la que la violan, con un realismo tan soberbio que potencia cierto shock al espectador; y la del antagonista Luis Hostalot, que si bien está un tanto sobreactuado, consigue de manera sobresaliente retratar un personaje al que le tendremos un asco y una repulsión bárbaras, que en resumidas cuentas era lo que se pretendía. 

Adela siendo violada

Sin más ni más, "Coto de caza", una gran exploitation made in Spain, una de las mejores pelis de cine "quinqui" que he tenido la ocasión de ver y sin dudas, una de las joyas de nuestro cine más desmerecidamente olvidadas y que yo reivindico a grito pelado, porque es indudablemente potente y su poder de no dejar indiferente a nadie creo que lo sigue manteniendo treinta años después de su realización. 

El hijo de Adela le echa un par de huevos y despacha a tiros a sus atacantes


*MI MOMENTO FAVORITO: sin lugar a dudas, esos quince tensísimos minutos finales que incluyen una atroz violación a Adela (Assumpta Serna) por parte del cabrón del Mauri (Luis Hostalot) y dos criminales más, compinches suyos, y por supuesto; el posterior ajuste de cuentas contra estos indeseables. El hijo pequeño de Adela, agarra una escopeta y se carga a los dos compinches y después Adela, dejará de lado sus creencias morales, y será la encargada de despachar al Mauri con la misma escopeta.

Adela se despacha contra su violador

4 comentarios:

  1. Muchas gracias Tomi Roberts por rescatar esta joya de película. Yo también echo de menos la "crudeza" de las películas de aquel entonces. Si los profes de instituto quieren que los chavales cojan miedo a pincharse heroína, que les pongan "El Pico" y no "Trainspotting". No hay color.

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  2. estoy de acuerdo, sin menospreciar "trainspotting", muchísimas gracias por tu opinión, un saludo...

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  3. Ya casi no me acordaba de la película y lo curioso es que me hace pensar en el bestial final de "Perros de paja"...

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  4. muchísimas gracias por tu comentario y por pasarte, un saludo...

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