lunes, 10 de marzo de 2014

El limpiabotas (1946) de Vittorio De Sica



Los dos pequeños protas, Pasquale Maggi (Franco Interlenghi)
y Giuseppe Filippucci (Rinaldo Smordoni)
A finales de los años cuarenta, Italia era un país en absoluta decadencia (similar a la que vivía nuestro propio país). La consecuencia había sido que fue muy pero que muy castigada por las devastadoras consecuencias de la Segunda Guerra Mundial. Fue el período en el que un puñado de cineastas crearon el llamado neorrealismo, vertiente en la que autores como Roberto Rossellini, Luchino Visconti o Vittorio De Sica, decidieron retratar la espantosa realidad que su país vivía a través de películas de gran profundidad dramática y de duros argumentos. He de reconocer que no caso mucho con este movimiento cinematográfica, y no porque no reconozca su valía dentro del Séptimo Arte (que la tuvo y muy importante), sino porque la mayoría de los films que he presenciado de la misma poseían un ritmo demasiado pesado, eran películas muy aburridas, lentas y tediosas; algo que desde mi perspectiva (y díganme lo que quieran las personalidades más expertas y cultas en el campo de la crítica cinematográfica), no compone una película interesante (ya dejé bien clara por ejemplo mi opinión sobre una de las magnas obras neorrealistas "Alemania, año cero" de Rossellini). 

Los chavales trabajan como limpiabotas

Fue por la mera curiosidad cinematográfica por mi parte, que me decidí a ver "El limpiabotas", uno de los films iniciadores del neorrealismo (junto con "Roma, ciudad abierta", por la circunstancia de que fue la primera película en recibir un Oscar a la mejor película extranjera (o de habla no inglesa, como se quiera denominar), y en ése momento me propuse visionarme todos los films que habían sido galardonados con la estatuilla dorada en dicha categoría (algo que terminé desestimando porque, sinceramente, la mayoría me produjo tremendas decepciones). Y bueno, he de decir que el film supuso para mí una gran sorpresa, porque me encantó. 

Los dos protas montando a caballo

Los dos pobres acabarán entre rejas
A diferencia por ejemplo de otras pelis neorrealistas como la propia "Alemania, año cero", este film de Vittorio De Sica, no simplemente se limita a mostrarnos la devastación de la dura posguerra, repleta de pobreza y penurias varias. El director va a más y nos hace partícipes de las desgracias de dos niños, que serán los protagonistas de la cinta. Los pequeños Pasquale Maggi (Franco Interlenghi) y Giuseppe Filippucci (Rinaldo Smordoni), serán los elementos en los que se nos irá presentando un relato tremendamente dramático y bastante duro e impactante. Los pobres niños sueñan con comprarse un caballo y para conseguirlo, teniendo en cuenta la tan mala situación de sus familias, intentan conseguir algo de pasta limpiando botas. No obstante, a pesar de la bondad de los chavales, el destino se cebará con ellos de la forma más cruel, pues sin comerlo ni beberlo, acabarán siendo encerrados injustamente en un correpcional. Dentro de este lugar (más similar a una prisión de adultos que a lo conocido hoy mundanamente como correpcional para menores), los pobres las pasarán realmente putas. El odio y la traición se irá apoderando de sus puros corazones y desagradables acontecimientos los irán precipitando a un trágico final. "El limpiabotas" no da tregua ninguna, no muestra piedad porque los personajes sean unos infantes, es meramente realista. 

El correpcional parece más bien una prisión

La vida encerradoe es bien dura
Me atrevería a decir que es sin duda, la única película del neorrealismo italiano que me hizo partícipe verdaderamente de la historia que nos cuenta. A diferencia de otras muchas (incluso de su propio director), el ritmo no perjudica demasiado a la propia película (algo para mí fundamental) y consiguió atraparme desde el primer momento. Hay que saber pasar por alto, en mi opinión algo un tanto perjudicial, su apariciencia visual, una fotografía un tanto sucia (alejada de la gran claridad de las magnas producciones hollywoodienses) y una calidad sonora (yo al menos la vi en versión original y así era) un tanto regulera (se nota que no contaban con unos medios muy pudientes). Con todo la película creo que es una joya, sinceramente hablando, un puñetazo directo, un film valiente y arriesgado. En mi opinión el modelo a seguir puramente neorrealista, aunque eso sí, la mayoría de films que componen este movimiento (como ya he nombrado) optaron por la opción de aburrir in extremis al personal, en vez de contarnos una historia dura y severa, sin descuidar un ritmo llevadero. A destacar la interpretación de los dos infantes, dos actores desconocidos y no profesionales (característica también del neorrealismo que se agenció el denominado dogma), que cumplen de manera sobresaliente como si fuesen actorazos de gran categoría. En resumidas cuentas, "El limpiabotas" es una película que merece la pena descubrir, una pelicula que eso sí, huye del buenrollismo hollywoodiense característico de esa época, para ofrecer algo distinto y de cierto valor concienciador; recomendable incluso para los que, como yo, no casen para nada con el arte neorrealista. 

Haciendo amigos en el correpcional

*MI MOMENTO FAVORITO: el desgarrador y dramático final, para derramar una lágrima, de verdad. 

Crueles son las putadas del destino

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