domingo, 30 de noviembre de 2014

Reservoir dogs (1992) de Quentin Tarantino



El elenco protagonista al completo
Aquí la flamante ópera prima del rey de ese sucio y vil acto llamado plagio, Don Quentin Tarantino, aclamado desde mi punto de vista como un maestro en el arte de hacer cine y contar historias. Pues bueno, "Reservoir dogs" fue el comienzo de todo, hace poco más de veinte años, todo el mundo pareció rendirse a los pies de este "genio" y vitorearlo de por vida como un sublime realizador. Obviamente yo no pienso así, no sé, yo jamás en mi vida le he visto ese toque tan maestro digno de admirar que la mayoría de la gente destaca de su cine. Pero bueno, hablando de "Reservoir dogs" diré un par de cositas por lo que desde mi punto de vista, no deja de ser un mojoncete sobrevaloradísimo. La primera y la más evidente de todas es que estamos ante un grandísimo plagio por parte de este "ilustre" director, del film oriental "City on fire", del que no sólo copió descaradamente la historia (eso sí, la contó de forma no lineal, para quedar de guay, faltaría más), sino que además se lucró al dedillo de escenas concretas (calcadas plano por plano) y secuencias de acción, atribuyéndoselas como suyas propias. Lo repito, ¡hay que tener cara! 

Discutiendo sobre el significado de "Like a virgin"
de Madonna, una conversación muy "trascendente"

Ya de antemano, ese garbo a la hora de dirigir que tanto se destaca de él, ese arraigo a la hora de crear un guión que tanto se le valora, hay que decir que no son de cosecha propia, pues está más que comprobado que con todo el morro, lo ha usurpado de otros; que luego lo haga mejor o peor, eso ya es otro cantar, pero dejémonos de llamar inspiración al más sucio y descarado plagio, porque luego hay otros que por menos, se les ha tachado de copiones (el más claro caso, Brian De Palma, al que han acusado de manera infame en más de una ocasión, de ser un mero parásito de Hitchcock, cuando al menos de Palma, aún inspirándose en el maestro del suspense, sí que ha demostrado salir airoso con historias nuevas y diferentes enfoques que a su vez lo han convertido en maestro digno de imitar -de hecho, Tarantino lo ha copiado en múltiples ocasiones-). 

El típico planito (punto de vista de un maletero) que tanto se agenció Tarantino

El pobre poli torturado, pero esto no
es violencia gratuita, ¡para nada!
Pero vamos con otra cuestión. Siempre me ha hecho gracia, como los típicos gafapastas creídos, apuntan la grandeza de los diálogos de Tarantino. Bueno, el film abre con el propio Tarantino (interpretando a uno de los personajes de la cinta) emitiendo una parrafada sobre el significado soez y guarro de la canción "Like a virgin" de Madonna, que si trata sobre un tipo que tiene un pollón y que se la trinca y tal y tal, mientras el resto de los personajes debaten sobre el tema. Bueno, a mí personalmente me parece un diálogo pobretón y mierdero, y ya no hablemos de lo vulgar que es. Por favor, si en lugar de tratarse de un film de Tarantino, colocas el mismo (el mismísimo) texto en una peli de cualquier otro con menos prestigio, los mismos gafapastas que alaban esta clase de diálogos dirían lo que de verdad es, una conversación de retardados. Y sino, ese otro momento en el que conversan los personajes de Chris Penn y Michael Madsen y uno le comenta a otro lo muy lleno que tiene el cuerpo del semen de un negro que se supuestamente lo puso a cuatro patas en la cárcel. ¡Madre mía!, ¡qué prosa!, ¡qué poesía literaria!, ¡ni Quevedo, ni Lorca!, ¡qué profundidad de diálogos, ¿en serio se puede destacar grandeza en semejante texto?, entonces cómo llamarían a una conversación chabacana de un grupete de quinquis, ¿el nuevo Quijote? Por favor, de verdad es algo inconcebible para mí la gran cantidad de baba que se derrama con este tío. 

¡Venga, a ver quien la tiene más grande!, ¡la pistola, claro!

Ahí, copiando bien clarito a "City on fire"
Y yendo con otra cuestión, mencionemos el tema de la violencia. Me hace gracia lo mucho que critica, para mal, la crítica (valga la redundancia) experimentada la violencia gratuita en el cine. Pelis de terror, gore, etc., son consideradas a menudo el cáncer del Séptimo Arte sin contemplaciones. En cambio en las pelis de Tarantio, ¡vaya, qué cosa!, se alaba como otra gran proeza de este "genio creador". ¿Acaso la escena en la que el personaje de Michael Madsen se divierte torturando al poli, le corta una oreja y se dispone a quemarlo mientras bailotea, no es una clara muestra de violencia excesivamente gratuita?, ¿acaso no es una escena plenamente sádica?, me pregunto: ¿por qué demonios nadie se atreve a decirlo al tratarse de un film de Tarantino y lo único que leo y oigo son constantes piropos ante esta forma casi "pornográfica" diría yo (¿qué pasa?, según la mayoría de los críticos la violencia de pelis como "Viernes 13" es "pornográfica") que representa este director la violencia? En fin, a mí me parece que a sus films se le consienten una licencias que a los de otros no y que a menudo, sus múltiples cagadas y mojones, tienden a ser suavizados con la coletilla de que estamos ante un autor muy peculiar y grandilocuente, y me parece, en serio, muy injusto.

Harvey Keitel, el más chulo del cotarro

Bien porque ha sido un puto pelota (que lo ha sido) y que ha sabido bien lamer qué determinados culos, o que mi visión del cine está tan gravemente distorsionada que no consigo ver su grandeza, o que el criterio del mundo es tan inentendible (son divagaciones mías), la realidad es que ahí seguimos teniendo al señor Tarantino haciendo auténticos despropósitos, malos bodrios de serie B pero con desorbitados presupuestos y como siempre, llevándose méritos, aplausos y premios. Bueno, yo lo diré siempre muy alto y muy claro, y ante todo con sinceridad, Tarantino es lo más sobrevalorado que te puedes tirar a la cara (como se suele decir), el burro al que le ha sonado la flauta y que para colmo, ha labrado una larga lista de seguidores. Y por cierto, "Reservoir dogs"; un cagarro, creo ni aunque me pagasen (bueno habría que razonar el precio) me volvería a sentar a verla. Para mí es como el agua bendita para los vampiros.

¡Cuánto cariño se procesan!

City on fire (1987) de Ringo Lam



El detective Ko Chow (Chow Yun-Fat)
Incondicionales devotos y admiradores de Tarantino, en este comentario con casi toda seguridad desvelaré una cosita que muchos desconoceríais. En muchos sitios me he cansado de leer múltiples reseñas alabando el trabajo complejo que supuso elaborar el guión de la ópera prima del señor Tarantino, "Reservoir dogs", y la destreza del director de componer un film soberbio y magistral y bla bla bla; todas las hostias que le quieran atribuir los lameculos de los críticos. Eso sí, en ningún sitio (pero en ninguno), he visto que nadie señale (no sé si por desconocimiento o por ensombrecimiento, para no delatar a tan devoto plagiador) que "Reservoir dogs" es una copia, calcada, pero calcada del film oriental que nos ocupa. "City on fire" nos cuenta como un policía encubierto (Chow Yun-Fat) se infiltra en una banda de ladrones, los cuales planean un atraco multitudinario a una joyería. Bien, la premisa exacta que usurpó posteriormente Tarantino para cubrirse de gloria y recibir los aplausos de la crítica y el público, los cuales no detectaron su lamentable labor parasitaria.
 
Ko Chow haciendo el gilipollas con su repelente novia (¡qué aburrimiento!)

Ko Chow es reclutado para una misión arriesgada
Y es que Tarantino no sólo se molestó en calcar la historia a raja tabla, también se encargó de copiar planos, secuencias y todo lo referido al lenguaje visual utilizado aquí por el realizador Ringo Lam. La consecuencia, ya se sabe, a Tarantino lo coronaron como un director de culto y a "Reservoir dogs" como una obra maestra, ¡tóquense ustedes los cojones!, ¿cuál fue el mérito de Tarantino?, verse este film y copiarlo, nada de inspirarse en él, de eso nada, llamemos las cosas por su nombre, Tarantino lo plagió descaradísimamente, si es que no hay más que ver ambas películas y sacar comparaciones. ¡Es bastante vergonzoso! Vergonzoso lo digo en el sentido de que, vale, el cine está lleno de intertextualidad, muchos autores se basan en otros para tomarlos como maestros y mentores, pero es que lo de Tarantino no tiene nombre, este señor se ha lucrado de la labor de otros para hacerse sus películas e insisto, me parece lamentable que se le eleve a la talla de gran genio creador, cuando merecidamente se ha ganado a pulso el apelativo de "parásito". Bueno, dicho esto, en lo referido a la película debo decir que personalmente me parece una pachanga tremebunda.
 
Pre-Reservoir dogs

Aquí todo el mundo va a liarse a tiros
Los pocos que la conozcan, seguramente deban su propio conocimiento sobre su existencia a poseer la coletilla de haber sido el film "inspirador" (ejem) de "Reservoir dogs" (algo de tajada está bien que saque del renombre del tipo que la usurpó, creo que es justo), y aún así tampoco es que sea muy popular. La película gana puntos en lo referido a sus escenas de acción, las cuales están muy bien coreografiadas y excelentemente rodadas (muchas, también han sido víctimas del saber hacer plagiador de Tarantino, el cual se agenció como propias múltiples escenas que posteriormente calcó en su ópera prima), tienen ritmo y no escatiman en violencia. La pena es que, exceptuando momentos puntuales, la película es un puñetero rollo. La historia del romance del policía es una puta mierda, el suspense es bastante nulo y no hablemos de la labor actoral, nefasta, muy pobre, paupérrima. A mí, la verdad es que me aburrió bastante, porque la acción va a trompicones, la peli empieza fuerte y directa, con una escena de robo muy potente y luego hasta muy cercano el final, no recupera esa vivacidad. Haciendo balance, no puedo decir que me fuese precisamente santo de mi devoción, simplemente me parece una pieza curiosa de visionar, sobre todo para descubrir las auténticas y genuínas fuentes del cara dura de Tarantino, pero poco más, desde luego no sería un film al que le dedicaría gustosamente un nuevo visionado.

¡Qué mal momento está pasando el pobre poli!

viernes, 28 de noviembre de 2014

Vida de este chico (1993) de Michael Caton-Jones



El prota, el sufridor Toby Wolf (Leonardo DiCaprio)
Un drama bastante conmovedor y sólido, basado en la autobiografía de Tobias Wolf, el cual relata la complicada situación familiar que vivió durante su adolescencia durante la década de los cincuenta. Debo decir que en mi opinión, junto a "¿Quién ama a Gilbert Grape?" me parece que estamos ante la mejor interpretación de Leonardo DiCaprio (sin olvidarnos de "Critters 3",... ¡es broma!). La verdad es que he de reconocer que hubo un tiempo que no sé por qué, no aguantaba a DiCaprio, tal vez por esa grandísima avalancha de adolescentes babeantes por esa imagen de eterno adolescente galán que le propició ese magnífico film de James Cameron, "Titanic". Tal vez fuese el hecho de que hubo un tiempo en el que salía hasta en la sopa, lo que hizo que de verdad me repudiase su cara de niñato eterno. 

Toby con su madre Catherine (Ellen Barkin)

Dwight (Robert De Niro), el violento padrastro de Toby
Pero entonces vi esta película y flipé, porque DiCaprio está verdaderamente genial y tiempo después vi la que ya mecioné de "A quién ama...?" y por descontado creo que DiCaprio es un actorazo, con sus más y sus menos (como todos), pero en resumidas cuentas me parece hoy por hoy de los mejores actores del panorama actual (por así decirlo). Este film es bastante demoledor, triste y conmovedor, y el gran acierto de todo este conjunto es el propio DiCaprio que carga sobre su imagen prácticamente el peso principal del film, interpretando a un joven que sufre constantes maltratos por parte de su cruel padrastro. Por otro lado está Robert De Niro (que hace del agresivo padrastro), pero halagar una interpretación suya está de más, porque ya se sabe que papel que caiga en sus manos, es papelón asegurado. En general es una película bastante acertada en todos los aspectos, está correctamente contada y en ningún momento llega a aburrir, por el tema en cuestión que aborda que no me resulta en sí agradable, por lo crudeza que refleja, no es digamos una película de mi estilo, pero sin lugar a dudas se puede decir que es un gran melodrama, que cuenta una buena historia y que tiene interpretaciones sobresalientes. De nuevo recalco, DiCaprio está magnífico.
 
Dwight es especialmente duro con Toby

*MI MOMENTO FAVORITO: ese violentísimo y duro enfrentamiento entre el desquiciado Dwight (Robert De Niro) y el pobre Toby (Leonardo DiCaprio). 

La cosa se está yendo de las manos

Johnny Suede (1991) de Tom DiCillo



Aquí tenemos al jovenzuelo de
Johnny Suede (Brad Pitt) luciendo palmito
Sin irnos mucho por las ramas, aquí tenemos un soberano petardo. Una mierda repelente que muchos gafapastas han señalado como un gran clásico de cine independiente. Su director es Tom DiCillo, un realizador bastante reputado en su terreno, el cine indie, o sea no comercial, digamos que para gustos más refinados, más cultos, más intelectuales. Con eso ya digo mucho de la prepotencia que muchos se gastan cuando se prestan a abordar el comentario de un film semejante, para procurar quedar por encima del resto de la gente, con gustos más enfocados a lo mainstream, o sea a lo más banal y supercial. Yo soy de los que apoyan llamar a las cosas por su nombre, ya sea un film independiente, de bajo presupuesto, o una superproducción, es justo decir que si el proyecto es una patata, con merecimiento hay que decirlo y se acabó. "Johnny Suede" es un bodriete de mucho cuidado, cuenta con la peculiaridad de tener como protagonista a un jovenzuelo Brad Pitt, cuando todavía no era una estrella reconocida. 

Johnny aspira a ser como su ídolo, Ricky Nelson

Johnny, su tupé y su churri (Catherine Keener)
El chavaluco sale muy guapete, luciendo un look muy sesentero (con tupé incluido) emulando al que para el personaje que interpreta (quien da título al film) es su ídolo, el cantante y actor Ricky Nelson. Total, que el chico quiere ser una estrella del rock y, bueno en realidad lo que va sucediendo a lo largo del desarrollo del film, poco importa, porque en sí, no ocurre nada interesante. El film presenta un libreto vacío, estúpido, monótono y cargante. El chico se enamora, se desenamora, tiene "profundas" (al igual que absurdas) reflexiones consigo mismo y así transcurre hora y media, la cual nos acaba matando de aburrimiento. Lo dicho, la película es una patata, no merece la pena su visionado (ni siquiera por su curiosa estética -la cual me recordó un tanto a John Waters-), que no os engañen algunas de esas pedantes críticas que leereis sobre ella, en diversas páginas para cinéfilos con gustos exquisitos y sofisticados, asegurando que es un film de culto dentro del cine independiente, "Johnny Suede" es una solemne gilipollez, una bazofia cursi y excesivamente plana. No recomendable ni para las babeantes y devotas fans de Brad Pitt. ¡Qué mala es, por Dios!

Johnny se esmera en ser una estrella de rock, (ahí detrás anda
un también desconocido Samuel L. Jackson)

jueves, 27 de noviembre de 2014

Hace un millón de años (1966) de Don Chaffey



Raquel Welch luciendo palmito en la Prehistoria (un importante
reclamo, de aquélla, para ir a ver la película)
Corría el final de la década de los sesenta, los vampiros y los monstruos clásicos empezaban a estar un poco obsoletos, y claro, la productora británica Hammer buscaba reinventarse. Así fue como se puso en marcha la producción de este emblemático film, a su vez, remake de un clásico (del mismo título) de 1940, protagonizado por Victor Mature (el cual, no he tenido ocasión de visualizar). De "Hace un millón de años" hay que decir que efectivamente es un film mítico, sí, además presenta  espectaculares efectos especiales (para la época) realizados por el genio Ray Harryhausen y que por supuesto, también será eternamente recordado por los posados de la también mítica, sensual y escultural Raquel Welch. Pero sinceramente, con la mano en el corazón, me parece un coñazo. 

La chica Bond Martine Beswick, también es una sensual mujer de las cavernas

¡Qué chungo lo tenían los pobres cavernícolas para sobrevivir!
Me aburrí muchísimo viéndola y lo que es peor me saturé de tanto escuchar gruñidos y quejidos, porque señoras y señores, en el film no existe ni un solo diálogo. Que sí, vale, que los hombres de las cavernas no hablaban y emitían sólo gruñidos, de acuerdo. Pero tampoco había en aquella época rubias esculturales en bikini como Raquel Welch, ni rubiales depilados con slips debajo del taparrabos y en "Hace un millón de años" los hay. Así que puestos a saltarse las normas, yo habría incluido diálogos un poco más o menos inteligibles para haber hecho la película amena, sin más. Con todo, la película pasó a la historia por ser una rareza de gran encanto, cosechando muchísimo admiradores y para más inri, se convirtió en el éxito más rentable para su productora. No obstante, como ya he dicho, yo no la soporto, reconozco sus méritos (las peleas entre los dinosaurios son majestuosas e impresionantes), pero de la Hammer prefiero cien mil veces más los films de Drácula, Frankenstein, y demás revisiones que hicieron sobre monstruos clásicos. Por cierto, como curiosidad, el film fue rodado en Lanzarote; si es que en España tenemos paraísos de todas clases.

Emblemáticas las peleas entre dinosaurios

El silencio de los corderos (1991) de Jonathan Demme



La novata agente del FBI, Clarice Starling (fantástica
Jodie Foster, ganadora de un Oscar a la mejor actriz)
Algo inusual y conmocionante pasó en 1991, y es que todavía no alcanzo a comprender cómo fue posible que los remilgados de la Academia de Cine, osaron darle 5 Oscars (inclusive el de mejor película) a un film como "El silencio de los corderos", ¡y qué 5 Oscars!, pues esta película se convirtió en la tercera (y última) en lograr hacerse con las estatuillas denominadas como premios principales (película, director, actor, actriz y guión), mérito compartido con "Sucedió una noche" en 1934 y "Alguien voló sobre el nido del cuco" en 1975. Esto no lo digo como algo deyorativo, para nada, pues soy de los muchos que comparten la opinión de que "El silencio de los corderos" es una magna película, pero a ver si me explico, para nada veo que cumpla las características y requisitos que tan a menudo han seguido a raja tabla los condenados de la Academia de Cine para conceder sus prestigiosos premios dorados a lo largo de los años. El film es feista, deprimente, sucio, oscuro y muy tenebroso, nunca antes se le había dedicado una atención similar a un proyecto de estas características, como mucho se me ocurre el caso de "El exorcista", la cual obtuvo varias nominaciones y a la que se castigó y boicoteó, claramente por su carácter políticamente incorrecto y un tanto desagradable. 

La estrella del film, el Dr. Hannibal Lecter (grandísimo Anthony Hopkins,
uno de los Oscars más justificados de la Historia del Cine)

La imagen más característica de Hannibal
A eso me refiero con mi extrañeza a que "El silencio de los corderos" lograra semejante éxito sobre la alfombra roja dicho año. Pero justamente así fue y esto supuso algo fundamental en múltiples aspectos. El primero de ellos es que por fin se prestase algo más de atención a un género bastante vapuleado por la crítica, como es el de terror, y que lo sacase un poco del pozo de mierda fílmica al que siempre se le ha condenado. Que sí, que los más puristas y detractores del género seguirán con la subnormalidad de decir que "El silencio de los corderos" no es de terror, sino un thriller y patatín patatán. De acuerdo, estamos ante un thriller, pero no podemos negar que posee los suficientes elementos sórdidos como para inclinarse bastante a romper esa delgadita línea que en muchos casos, separa el thriller del terror. El caso más claro esto es que en su estreno, "El silencio de los corderos" suscitó tal nivel de impacto que incluso hubo peña que se vio sofocada y angustiada por las imágenes que estaba visualizando. Quizás el impacto no fue tal como por ejemplo lo supuso el estreno de "El exorcista" un par de décadas atrás (en el que hileras de ambulancias aguardaban a las puertas de los cines), pero sí que hubo testimonios de personas que se vieron obligados a abandonar la sala, debido a la desagradable experiencia que les suponía ver el film. 

Hannibal ayudará a Clarice a atrapar al asesino Buffalo Bill

El perturbado Buffalo Bill (Ted Levine), ¡qué repelús da!
¿A que eso no se suele mencionar mucho por ahí cuando los críticos de turno alaban esta película? No, claro, hay que recalcar siempre el lado "cultureta" de la peli y alejarla lo más posible de su pertenencia al género de terror, no vaya a ser que eso la pueda desprestigiar. En lo personal, la descubrí siendo muy, pero que muy pequeño. Es más, tengo en mi mente el recuerdo de estar jugando con un scalextric o algo similar en el salón de mi casa, un Domingo por la noche, cuando empezaba en la TVE-1 esta película. Claro, mi madre me dijo que no era una película que podía ver y bien, o quitó el canal o me mandó para la cama. La cuestión es que ya me las compuse para quedarme despierto y verla a escondidas (como muchas otras había visto ya). Y básicamente, sin enterarme mucho del argumento, se me quedaron grabadas dos escenas; una ésa en la que Hannibal se coloca la cara (tal cual) de un poli para escaparse de su confinamiento (en ese momento me pareció muy fuerte, lógicamente a día de hoy me resulta hasta light) y sobre todo, la del psicópata bailando vestido de mujer, ¡madre mía!, ésa sí que fue un shock (por cierto siempre me quedó en la mente la pegadiza cancioncilla de fondo, y hasta que no apareció en mi vida youtube, no logré localizarla). 

Una de las desafortunadas víctimas de Buffalo Bill

¿Conseguirá escapar esta pobre con vida de las garras de Bill?
No fue hasta ya unos cuantos añitos después, cuando ya pude verla enterándome de todo el percal y la verdad es que su historia me dejó atrapado. El film supone todo un torrente de tensión que va in crescendo hasta un final frenético. Me resulta curioso y admirable, el hecho de que en el recuerdo colectivo la figura de Hannibal Lecter haya quedado instaurada como el elemento clave del film, cuando realmente si contabilizamos sus apariciones, son muy pocas (de hecho el papel de Hopkins es la mar de reducido). Eso demuestra la fuerza, no del personaje, ¡ojo!, pues ya comenté en que "Hunter" de 1986 había sido el primer film en el que Lecter había hecho su debut cinematográfico como personaje (adaptación de la primera novela de Thomas Harris, "El dragón rojo"), y en cambio había pasado sin pena ni gloria ante los ojos de los espectadores, sino de la fuerza que un actorazo como Anthony Hopkins le imprimió para convertirlo en algo icónico y en toda una figura representativa del mundo del terror. 

El lado más caníbal de Hannibal

Cameo del cantante Chris Isaak, el de la
famosísima canción "Wicked Game"

Y es que así es, el punto fuerte del film es precisamente este Hannibal Lecter, el cual posibilitó que el señor Harris, viese potenciada la fama de su creación y que ésta se adjudicase el rostro siniestro de Anthony Hopkins. Eso sí, no quiero dar de lado la labor de la auténtica protagonista, Jodie Foster (para mí una de las mejores actrices cotizadas de ese momento), como la agente novata del FBI, Clarice Starling, que soporta el peso psicológico son ese rostro frío y tristón de manera a la para sofocante y encomiable (esas charlas con Hannibal ponen a veces los pelos de punta y otras son la mar de emocionantes; es curioso pero se deja entrever que el único apoyo de la joven, la única persona que la escuchó de verdad y le sirvió de consejero, es en realidad un cruel y perturbado psicópata, fino y sofisticado, pero psicópata al fin y al cabo). De hecho Jodie Foster se llevó a casa su segundo Oscar (ya había ganado uno en 1988 por "Acusados") y obtuvo el récord de ser la actriz más joven (no tenía todavía 30 años) en haber conseguido dos premios de esta categoría. Así que sin lugar a dudas "El silencio de los corderos" no trajo más que buenos resultados y buenas noticias para los miembros de su equipo. 

Grotesca y sangrienta composición

Por señalar una injusticia clara y dura, me parece insultante que los de la Academia no se acordasen de la excelentísima labor de Ted Levine, como el psicótico Buffalo Bill. Para mí Levine hace una interpretación cojonudísima (no es un papel nada fácil), y creo que es insultante que ni tan siquiera lo considerasen para una nominación. En fin, siempre nos quedará en la retina a muchos esa imagen pesadillesca suya, travestido. Mencionar como curiosidad, que este asesino está inspirado en la figura del psicópata real Ed Gein (que también dio base a otros emblemas del género como "Psicosis" o "La matanza de Texas"). Pues bueno, no sé qué más añadir, que la película es genial, fue un grandísimo éxito de taquilla y aunque a muchos les joda reconocerlo, supuso el descubrimiento (auténtico, sin tener en cuenta el Hannibal ya interpretado por Brian Cox) de un icono clave del cine de terror. ¡Menudo puntazo la máscara, acojonante!

Acojonante final, ¡para morderse las uñas! (y no, no es "Rec")

*MI MOMENTO FAVORITO: por cojones tengo que señalar ése que me dejó en shock de pequeño, la escena en la que el psicópata Buffalo Bill (Ted Levine), protagoniza un grotesco baile, travestido, a ritmo de la genial canción "GOODBYE HORSES" (gracias a youtube, por posibilitarme descubrir cuál era tras años de búsqueda).

Buffalo Bill saca a relucir su lado más femenino

miércoles, 26 de noviembre de 2014

Hunter (1986) de Michael Mann



El detective Will Graham (William Petersen)
a la caza de un brutal asesino
"Hunter" es un curiosísimo film, a día de hoy seguro que para muchos, una rareza a reivindicar (no tanto para mí). Bueno, seguro que el 99,9% de la población mundial conoce el film "El silencio de los corderos", ese emblemático y magno thriller que para muchos (la gran mayoría) supuso la primera toma de contacto en la gran pantalla con el personaje de Hannibal Lecter, majestuosamente interpretado por Anthony Hopkins. Pero, lo que muchos (la gran mayoría, también) no sabrán, es que "El silencio de los corderos" era en realidad la secuela de esta película que nos ocupa. Y es que "Hunter" fue la adaptación de la primera novela que Thomas Harris escribió, en la que apareció el famoso personaje, "El dragón rojo" (la cual contó con su correspondiente remake en 2002, ya con Lecter interpretado por Hopkins). Pues bueno, la verdad es que la notoriedad de este film en su estreno fue prácticamente nula, y si a día de hoy, es recordada por una minoría es por la magnitud que cinematográficamente hablando le otorgó el éxito de "El silencio de los corderos" al personaje de Lecter, por la mera curiosidad de que ésta fue la primera película en la que tuvo su aparición. Recuerdo que mi encontronazo con este film fue meramente casual. 

Una de las víctimas del asesino

El primer Hannibal Lecter (Brian Cox)
A finales de los noventa (yo tendría unos 11 años), en un canal del Satélite Digital, llamado "AXN", emitieron durante un mes de Agosto, un especial denominado "Lunas Peligrosas" o algo así. En dicho ciclo de programación echaban todos los Viernes del mes un film de terror, que mantuviese relación con el tema de la luna y así fue cuando vi "Aullidos" (la primera semana), "Miedo azul" (la segunda) y ésta (la tercera). Cuando la vi anunciar suponía que estaría ante otro film sobre hombres lobo, pues sus antecesoras en el ciclo emitido, habían pertenecido a esta temática; pero enseguida pude comprobar que nada de relación guardaba con el tema (bueno, el asesino mataba las noche de luna llena), aunque teniendo en cuenta que la emitida la cuarta semana fue "Shocker, 100.000 voltios de terror", me hizo pensar que a los del canal les sudó un poco la polla que las pelis elegidas tuviesen algo de relación con la temática planteada. Total, que comencé a ver "Hunter" y me quedé a cuadros cuando oí mencionar el nombre de Hannibal Lecter (ya había visto "El silencio de los corderos"). Mi sorpresa fue aún mayor cuando vi que otro tipo (¿había alguien capaz de ser Hannibal que no fuese Anthony Hopkins?) le ponía cara al psicótico doctor. 

Ahí, los del C.S.I. currando

El asesino se ha ensañado bien con éste
Poco a poco, me fui tragando esta, para mí, extrañísima película, mientras la confusión y el desconcierto me iban invadiendo. La verdad es que, cuando acabó, no sabía muy bien como denominarla, no sabía si decantarme entre la opción de "me gustó" o "no me gustó", aunque sin lugar a dudas la peli poco efecto hizo en mí. Lo que sí que tengo que reconocer es que fue un gran descubrimiento que agradezco haber experimentado. Como me imagino que la mayoría de la peña a la que le mole el personaje de Hannibal, habrá visto la versión de "El dragón rojo" de 2002 dirigida por Brett Raner, pues debo decir que, al tratarse de una adaptación del mismo texto de Thomas Harris, ambas presentan una historia prácticamente similar. Eso sí, no vamos a engañarnos, el remake es mucho mejor, es un thriller más acojonante, más redondo, más sólido, mejor planteado y mejor resuelto. "Hunter" posee una estética un tanto raruna, la puesta en escena es muy televisiva, de hecho por momentos parece que estemos viendo un episodio de cualquier serie de policía, estirado hasta cubrir la duración de un largometraje. 

Lecter colabora con la poli en la caza del asesino

El asesino (Tom Noonan) de ligoteo con una ciega (Joan Allen)
Le falta alma, la cual sí se le imprimió a la posterior versión de 2002. Las interpretaciones son muy planas, tanto la del psicópata principal (¡qué soso es el tío, madre mía!), como la del policía (interpretado por William Petersen, famoso hoy en día gracias a la serie "C.S.I.") y los secundarios. Merece ser destacado, por la mera curiosidad, Brian Cox (actor bastante polifacético) que fue el encargado de ponerse por primera vez en la piel de Hannibal Lecter. En su momento (sin tener la referencia de Hopkins) podríamos llegar a decir que su interpretación es loable y correcta. Pero claro, ahora que es imposible no imaginarnos al personaje con el rostro de Anthony Hopkins, pues es inevitable que la caracterización de Cox se quede muy fría, muy contenida; como que no dice nada; vamos que Hopkins se lo come (en sentido metafórico). En resumidas cuentas, "Hunter" es curiosa, pero nada encomiable. Es insípida, rancia y anticuada; afortunadamente consiguieron darle un enfoque cinematográfico al Dr. Lecter como era debido, porque si nos hubiésemos quedado con la imagen del mismo aportada por esta primigenia versión, ni de coña en la actualidad figuraría como uno de los psicópatas cinéfilos más recordados y carismáticos existentes. A pesar de todo, la recomiendo, y es que si uno se quiere ver todas las pelis de Hannibal, ¡joder!, no puede pasarla por alto.

Aquí, el dragón rojo