Amantes criminales (1999) de François Ozon

¡Pobre Saïd, tan joven, tan musculoso y con tan poca vida por delante!

La verdad es que nuestros vecinos los franceses, han demostrado en más de una ocasión tener los huevos bien grandes a la hora de componer sádicas historias repletas de violencia y truculencia a mansalva y ''Amantes criminales'' viene a suponer otra de esas muestras, eso sí, difícilmente digeribles por un público mayoritario. ¡Telita fina la propuesta que presentó el director François Ozon allá por finales de los noventa! Una especie de versión sadiquísima de unos ''Romeo y Julieta'' tan modernos y enamoradizos, como enfermizos y crueles. Nuestra ''Julieta'' es Alice, una monada de niña que ansía (como los personajes del clásico ''La soga'' de Hitchcock) saber qué se siente al matar a alguien (según ella, dicha sensación debe de ser algo así como orgásmica). La chica ya ha fichado a su víctima, un guaperas de la escuela llamado Saïd, fuerte y musculoso (¡buena sangre que derramar!). 

Los amantes criminales, Alice (Natacha Régnier) y Luc (Jérémie Renier)

Recalco; pobre Saïd

Pero claro, ella no puede hacerlo solita, así que (con alguna mamadita de por medio, ¡menudo poder de seducción se gasta la muñeca!) acaba convenciendo a su tontolaba ''Romeo'', Luc, de que le ayude a ejecutar su ansiado plan. Y así pasa. Lo que Luc es capaz de hacer por el amor de su Alice, no tiene límites, así que ni cortos ni perezosos, arrinconarán en un determinado momento de despiste, al pobre Saïd en las duchas del gimnasio y lo mandarán al otro barrio a puñaladas. ¡La escena se las trae de lo violenta y cruel que resulta! (aunque no sea precisamente explícita). Pero el destino les deparará un castigo correspondiente a su crimen. Estos dos ''tiernos'' amantes acabarán viviendo su calvario, cuando son secuestrados por un perturbado tipejo de edad abanzada que vive aislado en una cabaña en medio del monte. La chica acabará confinada en un sótano mugriento, mientras que el nene saciará las necesidades morbosas del abuelete (¡ver para creer, de verdad!), que lo someterá a un jueguecito, de contenido altamente homoerótico, verdaderamente desagradable de ver.

Una duchita después del crimen

Metidos en la boca del lobo

''Amantes criminales'' es una soberana bizarrada, una película indescriptible que mezcla el rollo adolescentes rebeldes y peligrosos, con el tema vida rural y survival, con erotismo, algo de gore, en fin que acaba siendo una pieza de difícil clasificación. Por momentos la estaba viendo y me costaba asimilar lo que estaba presenciando en la pantalla. Sinceramente no es algo que haya disfrutado, las escenas en las que el viejo obliga al chaval a lavarlo, a manosearlo y seducirlo, me dieron bastante grima; bueno, desde luego ésa es la clara intención de los realizadores del film, crear mal rollo, provocar repugnancia y atentar contra todo lo políticamente correcto establecido. El resultado final de la peli es chocante desde luego, pero no sé, creo que como el argumento desvaría entre tantos elementos, la suma de todo es tan desconcertante como confusa y poco efectiva. 

El viejo salido (Miki Manojlovic) quiere jugar... ¡qué peligro!

El viejo salido tiene las manazas muy largas

Al finalizar el film me quedé con una sensación un tanto confusa, no había seguido una historia interesante, no había sido capaz de involucrarme con las vivencias de los personajes (caracterizados por unos actores carentes de expresividad, carentes de alma, y más sosos que la madre que los parió), no había sido testigo de ningún tipo de evolución, simplemente me había tragado un porrón de escenas bizarras y momentos de repelente desagrado. Se agradece el tono valiente muy típico de varios productos franceses (más directos, más gráficos y más extremos) que dejan en bragas a muchos otros trabajos americanos más contenidos, pero en resumidas cuentas no me parece una película buena, en absoluto; provocar por provocar tampoco sirve de mucho si lo que cuentas es tan excesivamente vacío, banal y falto de interés.

Al viejo salido le va el morbo