martes, 24 de febrero de 2015

Con faldas y a lo loco (1959) de Billy Wilder



Los protas, Joe (Tony Curtis) y Jerry (Jack Lemmon)
Imprescindible, colosal, maravillosa, divertidísima, etc,... son adjetivos que he leido y he oído constantemente refiriéndose a esta película y sinceramente, le vienen al pelo. "Con faldas y a lo loco" es buenísima, es una comedia verdaderamente desternillante, toda una joya, sí señor. Este famosísimo film del maestro Billy Wilder se ha convertido en todo un clásico, creador de sumas referencias dentro del género debido a un magno guión que posteriormente ha sufrido cientos de imitaciones. No obstante, debo señalar una curiosidad que muchos desconocen del mismo (incluido yo hasta hace bien poquito), y es que ''Con faldas y a lo loco'' es en realidad un remake de un film alemán llamado ''Ellas somos nosotros (Fanfaren der Liebe)'' de 1951, el cual no he tenido ocasión de localizar para poder visionarlo. Es un detalle no menos llamativo pues, estamos ante un caso poco común en el que un remake ha sido tan soberbio y tan majestuoso que ha ensombrecido por completo la existencia de su referente original, aunque bueno, eran otros tiempos, un remake de entonces poco tiene que ver con lo que a día de hoy este término viene a significar (habitualmente algo bastante negativo), pero ésa es otra historia. 

Joe y Jerry se convierten en Josephine y Daphne

¡Qué chungos son éstos de la mafia!
La película se desarrolla a finales de los años veinte, durante la Ley Seca, época en la que los gángsters y mafiosos hacían su Agosto traficando con alcohol. Dos músicos inocentones (Tony Curtis y Jack Lemmon) tienen la mala suerte de ser testigos de un ajuste de cuentas entre dos bandas rivales, convirtiéndose por lo tanto en objetos de exterminio. Para poder escapar de un fatal destino, deciden hacerse pasar por mujeres para así poder unirse a una orquesta femenina, en donde conocerán al tercer vértice del triángulo protagonista, la imponente cantante Sugar (Marilyn Monroe). A partir de este momento, no cesarán de ocurrir hilarantes y divertidísimos acontecimientos. El film está lleno de momentos sensacionales y ya históricos. El guión es brillantísimo, la puesta en escena, dirección y demás aspectos técnicos también y ya no hablemos del terreno interpretativo. Ver a Tony Curtis y sobre todo a Jack Lemmon (nominado al Oscar por este papel) haciendo postureo vestidos de señoronas es para mearse. Y luego está Marilyn Monroe. 

Sugar (Marilyn Monroe) luce brillante cantando ''I wanna be loved by you''

Jerry marcándose unos bailes con su ''ligue'',
Osgood Fielding III (Joe E. Brown)
Yo siempre he dicho que Marilyn no era buena actriz. Francamente a mí no me llama nada la atención en ese sentido y siempre ha estado encasillada en una misma función, la de ser una chica ligerita y con pocas luces. Pero lo que no se puede dudar es que tenía algo, algo que la hacía brillar con luz propia, algo que la hacía destacable y es que un plano de Marilyn, un simple plano la hace parecer tan radiante, tan impresionante que da la sensación que irradia luz de ella misma (y eso que por lo visto dio bastantes problemas durante el rodaje, famosos son sus constantes retrasos, circunstancias que la hacían alguien bastante difícil para trabajar a gusto). El momento "I wanna be loved by you" forma parte de la Historia del celuloide, como también lo forma ese inmortal tango de Jack Lemmon con su "prometido" y ese desternillante final rematado con el "nadie es perfecto". La verdad es que me quedo sin palabras si tengo que describir el sin fin de cualidades que posee esta magnífica película. Una joya de la comedia, y no una cualquiera, sino una de las más grandes existentes a lo largo de los años. Maravillosa.

Joe se hace pasar por millonario para cortejar a la ingenua Sugar

*MI MOMENTO FAVORITO: ese icónico y guasón final, como ya he dicho, es ya todo un momentazo histórico dentro de la Historia del Cine.

''Nadie es perfecto''

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