viernes, 3 de abril de 2015

Salomé (1953) de William Dieterle


 
Salomé (Rita Hayworth)
Quizás no sea una de las obras de cine épico más vistosas (en lo referido a su componente visual) dentro de la amplia producción de este estilo que Hollywood llevó a cabo a lo largo de la década de los cincuenta y sesenta, pero desde mi punto de vista personal, ''Salomé'' se ha visto ciertamente desmerecida y olvidada de manera injusta. A mí particularmente me gustó mucho, sí bien es cierto que nos cuenta una historia totalmente distorsionada, en comparación con la versión expuesta en los textos bíblicos acerca de su protagonista, la propia Salomé, hijastra del rey Herodes de Galilea, pero como siempre apunto, en muchas ocasiones ¿qué importan ciertas licencias si son en pro de un agradable espectáculo? El personaje de Salomé siempre ha cargado sobre su figura la fama de ser alguien mezquino, cruel y manipulador (no hay más que ver, sin ir más lejos, el film ''Rey de reyes'' y echarle un vistazo a la performance que la joven Brigid Bazlen realiza brillantemente de dicho personaje). 

Salomé con su amor, el soldado romano Claudio (Stewart Granger)

Herodias (Judith Anderson), la maquiavélica madre de Salomé
Sin embargo aquí seremos testigos de una versión cándida, amable y que se comparece y sacrifica por el prójimo. Esta Salomé más humana cuenta con el rostro de la mítica y radiante Rita Hayworth (inolvidable en ''Gilda''). Hayworth viene respaldada por un magno reparto, el habitual en el género de aventuras Stewart Granger (interpretando a un soldado romano que acaba enamorado de Salomé, y viceversa), el actorazo de tomo y lomo Charles Laughton (encarnando al rey Herodes), a la ama de llaves que fue la pesadilla de Joan Fontaine en ''Rebeca'', Judith Anderson (como la reina Herodías, siempre tan perversa), etc. El film por lo tanto aporta una adaptación muy diferente al tramo bíblico en el que hace acto de presencia el personaje de Salomé, este personaje que pedía que le sirviesen la cabeza de Juan, el Bautista en una bandeja, en esta versión podemos ver el caso contrario, la muchacha se sacrifica (por amor) efectuando una sensual danza frente a su lascivo padrastro, para salvar al pobre profeta (cuyo destino trágico, será inevitable). 

Herodes (Charles Laughton) es todo un lascivo

La cabeza de Juan, el bautista, en una bandeja
La escena de la danza de los Siete Velos, es sin lugar a dudas, la más significativa y brillante de la película. Rita Hayworth se muestra espléndida y brillante, emulando su explosivo numerito musical en ''Gilda'', mientras enciende a Herodes como a una bomba a punto de explotar. Genial también Charles Laughton que con una simple gesticulación, dice mucho más que con mil palabras; sus miradas de viejo verde desnudan el cuerpecito de Salomé, reflejan claramente el calenturiento e irrefrenable deseo de trincarse sin miramientos a su atractivísima hijastra. En líneas generales, ''Salomé'' es una película épica un tanto más discreta que otras obras de más renombre, pero que cumple a la perfección su misión de entretener y supone una loable dosis de buen cine clásico, no gozó de un éxito exacerbado en su momento, pero afortunadamente el paso del tiempo le ha atribuido ese gozoso estatus de joyita a tener en cuenta. Yo la recomiendo encarecidamente, sobre todo por encima de otros muchos ladrillazos de más de tres horas que pululan por ahí con más renombre. 

Salomé hace caer la baba de Herodes con una provocadora danza

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