domingo, 2 de agosto de 2015

Instinto básico (1992) de Paul Verhoeven



Tórdido polvaco que...
El que ya conociese el cine de Paul Verhoeven de antemano, ya sabría que no es propio de él cortarse un pelo. Lo políticamente incorrecto y lo provocador han ido siempre aunado a sus películas, muchas de ellas no exentas de cierta polémica. Pues bien, el holandés ya afincado en Hollywood tras el exitazo de ''Robocop'' y ''Desafío total'' decidió retomar esa vertiente erótica de sus inicios, componiendo un thriller hiper mega subidito de tono y el resultado fue uno de las pelis calenturientas más recordadas e icónicas de la historia. ''Instinto básico'' es un film único es eso de aunar el cine de suspense al puro estilo Hitchcock (no faltan reminiscencias clarísimas del giallo italiano, más adelante mencionaré una referencia indudable a dicho subgénero), con erotismo gráfico y arriesgado, no como las mierdecillas contenidas que se suelen hacer hoy en día. 

...acaba muy malamente

El manipulable detective Nick Curran (Michael Douglas)
En su época el film resultó de lo más provocador, por razones evidentes, ciertas escenas sexuales siguen viéndose hoy insuperables, debido a su contenido explícito a la par de la elegancia de su filmación (morbo y pasión se dan la mano con gran estilo). La peli se ha instaurado a día de hoy como todo un clásico, dejando para el recuerdo el más famoso cruce de piernas que se pueda recordar en la historia del cine. Dicho cruce le propició el estrellato a Sharon Stone, encumbrada a mito erótico por excelencia desde ese mismo instante. Stone ya había hecho sus pinitos en el mundo del cine, incluso Verhoeven ya había requerido de ella para su anterior film ''Desafío total'', pero no fue hasta su papel de la inteligente, despiadada y extrema Catherine Tramell, que consiguió despuntar y conseguir la fama mundial. 

La maquiavélica y desinhibida Catherine Tramell (Sharon Stone)

A la Tramell le va la marcha
Tenemos acompañándola como cabeza de reparto a un experto en esto de hacer papeles de tíos inmiscuidos y enmierdados en tramas de carácter sexual, véase Michael Douglas (el cual, no me extraña, acabó declarando su adicción al sexo, algo de realismo tenía tanto encasillamiento ficticio), él haciendo de un investigador manipulable que cae en las garras de la peligrosa y potente villana. La peli cuenta además con una trama interesantísima, que logra enganchar, potenciada con un peculiar asesinato, un cantante de rock apuñalado varias veces con un picador de hielo (curiosa arma) mientras estaba en pleno coito. La sospechosa número uno es la propia Catherine Tramell, una escritora acaudalada en cuya última novela relata un crimen exacto al ocurrido en realidad (clara referencia giallística a la magna ''Tenebre'' de Dario Argento, no hay más que comparar ambas tramas para encontrar la conexión). 

El cruce de piernas más famoso de la historia del cine

Asesinato muy giallistico
Desde entonces, un lioso juego de mentiras, morbosidad, crímenes y demás asuntos turbios se desatará en una auténtica montaña rusa de emociones diversas. ''Instinto básico'' es el resultado del trabajo de un realizador arriesgado, que no tiene tapujos y que no temió nunca a mostrar en pantalla lo que otros han reculado hasta el simple pensamiento de filmarlo. Es un thriller tensísimo, violento y muy pero que muy picante. Sharon Stone está bellísima y maliciosamente arrebatadora, con razón su performance la ha consagrado como un icono de sensualidad y sexualidad. ''Las 50 sombras de Grey'' es material para niños en comparación con lo que el amiguito Verhoeven nos expone aquí, para mí es un film de visionado imprescindible, aparte de por lo mítico que es, porque posee cualidades absolutamente portentosas.

¡Qué de vicio!

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