viernes, 4 de septiembre de 2015

Despelote en el campamento (1979) de Chuck Vincent



Chavalucos en el campamento
Después de ''Desmadre a la americana'' y ''Los incorregibles albóndigas'', dos pelis de gran éxito entre el público juvenil, no podía ser de otra manera, comenzaron a aparecer las copias y explotaciones de dichas fórmulas, ambas pilares de lo que podríamos denominar pelis con adolescentes salidorros (más la primera) y de las denominadas ''summer camps'' (o sea pelis con chavalucos desarrolladas en campamentos de verano), de cuyas variantes durante los ochenta salieron a patadas. Pues bien ''Despelote en el campamento'' (curiosa traducción para el título original ''Summer Camp'', ¡mirad por donde!) es ni más ni menos que un mojón que intentó fusionar las fórmulas de las dos pelis anteriormente mencionadas, en una sola y el resultado fue un cagarro monumental que encontró su huequecito distributivo a través del mercado del VHS. 

En este campamento no se pierde el tiempo

Aquí tenemos a Linnea Quigley enseñando las peritas
Dirige un experto en hacer mierdecitas del estilo, Chuck Vincent y lo que encontramos en ella ya nos lo podemos imaginar, jovencitos con ganas de sexo, trastadas al estilo robar ropa interior a media noche y mucho despelote (el título hispano no miente). La calidad de la película es lamentable, la historia, bueno ¿qué historia?, sus logros técnicos, pues como es fácil de adivinar, apestan bastante, en sí el film es mediocre en toda su dimensión, a duras penas vale como simple entretenimiento porque aparte de ser plano es monótono y hasta tedioso. La verdad, muchas explicaciones más no merece, la comenté sin más por apurar estas fechas veraniegas que se están terminando y claro, ¿qué mejor época que ésta para hacer mención a estas pelis tan acordes a ella? Y porque cuenta con la presencia de la scream queen ochentera Linnea Quigley (aquí acreditada como Barbara Gold), por supuesto, muy fiel a su estilo, luciendo pechitos al aire, ¡of course! Francamente la presencia de esta fémina podría ser el único aliciente para que los más frikazos fans de las summer camps cochambrosas y de la roña ochentera, pudiesen interesarse por este bodriaco.

Discoteca particular

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