La familia Addams (1991) de Barry Sonnenfeld

 

La familia original de la serie televisiva de los sesenta

La verdad, de pequeño siempre me moló inconscientemente, haber tenido una familia como los Addams. Bueno, ¿por qué no?, este clan desinhibido que saquea tumbas juntos, juegan a apuñalarse, electrocutarse y desempeña todo tipo de artimaña macabra, en el fondo son como cualquier otra familia normal. Al menos son comprensivos con los suyos, ¿que la niña va por ahí con cara de muerta y aspecto siniestro?, ¿qué más da?, lo importante es que se quieren como son, están siempre unidos y entre ellos siempre hacen una piña ante los extraños (también es cierto, están ellos buenos como para ponerse a rajar del prójimo, con lo extravagantes que son). Fuera coñas; Gómez, Morticia, Pugsley, Miércoles, etc., la familia Addams es toda una caricatura de la imagen de la típica familia tradicional, y como sus coetáneos ''los Monster'', también procedieron del mundo televisivo a través de una serie allá por los sesenta. Cuando ya parecía que habían quedado un poco olvidados por el tiempo, apareció esta simpática adaptación cinematográfica que volvió a ponerlos a pie del cañón, y del éxito, es más, creo que la película acabó catapultando más aún la fama de la excéntrica y perturbadora familia (en lo personal, yo los conocí a raíz de la misma). 

Los patriarcas de los Addams, Morticia (Anjelica Huston) y Gomez (Raul Julia)

Los pequeñajos Miércoles (Christina Ricci) y Pugsley (Jimmy
Workman) con el tío Fétido (Christopher Lloyd)

Recuerdo cuando vi este film, un Viernes por la noche, lo emitieron en Tele5 (hace por lo menos veinte años) y la verdad me resultó de lo más curioso, esa estampa que genera la familia al completo no creo que deje indiferente a nadie. La película tiene una estética totalmente característica del estilo que personificó a Tim Burton, con un estilo cruzado entre lo barroco y lo gótico, repleta de tintes tenebrevistas e incluso cierto toque de expresionismo (está claro que de esta última corriente se empapó el gran Tim para crear algunas de sus más prodigiosas joyitas audiovisuales), por lo tanto la peli podría ir muy en la línea de otras del director. Pero lejos de resultar aterradora en su tono, por supuesto, ''La familia Addams'' hace gala de un humor negro que la transforma en un cachondeo padre. El film tiene toques desternillantes buenísimos, puntazos la mar de ingeniosos, véase algunas de las interacciones de los más pequeños cuando ''juegan'', o las apariciones de Cosa, esa mano tan peculiar (siempre fue mi ''personaje'' -podemos contarlo como personaje- favorito). 

El clan familiar al completo...

...sin olvidarnos de Cosa

El tema de las interpretaciones es otro puntazo a favor, el difunto Raul Julia encarnó a la perfección al patriarca del clan, así como Anjelica Huston que parece haber nacido para ser Morticia -nadie como ella le ha puesto rostro a la sexy vampiresa-, o Christopher Lloyd, con un look muy alejado del eterno Doc de ''Regreso al futuro''. Aunque si hay alguien en quien quiero hacer hincapié es en la pequeña Christina Ricci, la cual comenzó a destacar -desde muy temprana edad- en papeles de ''chica raruna y especial'', como posteriormente denotarían ''Casper'' o ''Sleepy Hollow'', haciendo de la espeluznante Miércoles, podría decirse que (aunque no fue su debut oficial en el cine) se convirtió en un nombre popular en Hollywood (con todo merecimiento). Como punto negativo, podría decir que a mitad de la película, la acción decae un poquito, cuando expropian a los Addams y los echan de su casa y todo ese rollo que pasa por en medio, he de decir que me pareció un poquito flojete y poco interesante, hasta que se vuelve a encarrilar todo satisfactoriamente en la parte cercana al desenlace, con la familia peleando unida ante las adversidades, para expulsar a los intrusos de su propiedad. 

Los ''inocentes'' jueguecitos de Miércoles y Pugsley

Y es que ese es el valor de la auténtica familia, a pesar de que haya miembros extraños, con un sin fin de rarezas, cuyos gustos no casen precisamente con las normas establecidas en sociedad y que en resumidas cuentas no sea lo ''políticamente correcto'' que cabría esperar, una familia siempre debe aceptarse y como los Addams, permanecer unidos y demostrarse afecto, porque por muy freaks y sádicos que sean, los Addams transmiten eso, el auténtico amor del vínculo familiar, y eso es lo que hace que el film sea transmisor de tan magistral mensaje. En fin, que la peli me parece un perfecto vehículo de entretenimiento familiar (¡cómo no!), y que pequeños y grandes la pueden disfrutar en su justa medida.

Una sesión de espiritismo es de lo más normal en casa de los Addams