El hombre Martini, Guido Anselmi (Marcello Mastroianni) |
Hablando en serio ¿alguien ha tenido las agallas de ver ''8½'' entera y sin dormirse? Me hubiese encantado, poner una cámara oculta en una sala en la que
reuniesen a todos los críticos intelectuales que ponen esta película por
las nubes y observar sus gestos durante la proyección de este ladrillo.
Estoy seguro que más de uno se torcería el cuello de dar cabezadas de
sueño, otros no pararían de bostezar y otros de mirar el reloj
suplicando su inmediato final.
Claudia (la guapa Claudia Cardinale) |
En fin, yo reconozco que no la he visto entera, la he quitado alrededor del minuto 80 y algo y me siento orgulloso de haber aguantado valientemente durante todo ese tiempo la agonía de tragarme semejante truño. Y es que encima su duración roza las dos horas y media, si es que alguien debería estudiar si eso no es un crimen contra la mente humana que se expone a semejante tortura.
Yo le pediría al señor mago que intentara hacernos la peli más amena, a riesgo de estar pidiendo magia negra |
''8½'' es el truño de los truños. Hay películas aburridas, pero que
con un poquito de aguante consigues acabar de verlas, luego hay
películas aburridísimas que te cuesta la vida acabar de verlas (aguanta
un poco más el sueño, venga que ya queda media hora) y luego está "8½", una película que no es simplemente aburrida, es que es el aburrimiento hecho película. Un film que desde el minuto uno ya apunta ser
un coñazo y la cosa no solo no cambia sino que va a peor. Un film que
no me dice nada, que no me interesa para nada, un film tan carente de
ritmo que deberían de proyectarlo sólo como cura contra el insomnio. De
verdad, lo digo en serio el único partido que veo que se le podría sacar
es el de hacer caer de sueño a todo buen hijo de vecino al que le
cueste conciliarlo. Creo que "8½" en este sentido es mano de
santo... en fin yo advierto, que aunque sea un film que toda
enciclopedia de cine te recomiende ver sí o sí, que sea considerada una
de las 100 mejores películas jamás hechas, aunque todos los críticos
digan que es una obra maestra que te cagas, que es una joya y bla bla
bla bla, yo no se la recomiendo más que a mi peor enemigo, para que sufra mucho, pero mucho...
Dos tontos haciendo el tonto |
Como curiosidad; ofrece un único consuelo y es ver, en contadísimas ocasiones, a la maravillosa Barbara Steele alejada de sus habituales roles terroríficos.
Voy a rematar este comentario señalando uno de los esperpentos fílmicos más abominables que ofrece este atentado contra todo atisbo de entretenimiento, y me estoy refiriendo a cierta escena en la que el protagonista recuerda su infancia, o no sé qué hostias, y nos plantan media hora el grotesco baile de una robusta señora (por no llamarla gorda con todas las letras), que es un clon del travelo Divine (fetiche de John Waters). En fin, señoras y señores, esto es Arte, lo dicen los entendidos para hacernos parecer al resto unos bobos incultos y cortos de entendederas.
¡Ay ba!, ¡se ha colado Divine en un film de Fellini! A ver si va a ser cierto que este señor en realidad hacía también cine trash |
Fellini = ZZZZZZZZZZZZZZZZZZ
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
Eliminar