Powered By Blogger

martes, 31 de diciembre de 2013

Crímenes en portada (1987) de Lamberto Bava



Sabrina Salerno en todo su esplendor, allá por los ochenta
Pues por ser 31 de Diciembre, último día del año, he decidido hacerle un homenaje a una persona que hace exactamente veintiséis años, dio mucho que hablar gracias a un curioso incidente, ¿intencionado?, no sé yo (es broma, estaba claro que ese pecho saltarín no rebotó por casualidad). Me estoy refiriendo a esa belleza italiana que a finales de los ochenta lo petó bastante gracias a la canción "Boys", Sabrina Salerno. Como todo buen hijo de vecino sabrá, esta señorita protagonizó en el especial de Nochevieja televisado en España, en 1987, un número la mar de resultón, para los varones sobre todo. Mientras deleitaba a su público, en riguroso playback, con la canción "Hot Girl" (que no fue "Boys", aunque en el recuerdo colectivo, todo el mundo relaciona ese pecho con la tonada de su más característica canción), a la muchacha, se ve que le dieron ropa que le quedaba pequeña, que durante uno de sus sensuales movimientos al ritmo de la música, uno de sus prominentes (¡y tanto!) pechitos, quiso volar por cuenta propia y asomó cual polluelo del cascarón. Dicho momento se convirtió un un hito televisivo en nuestro país y le proporcionó a Sabrina una desbordante fama, compartida con la tan igualmente sensual y coetánea Samantha Fox. Bueno, he de decir (y no me avergüenzo ni lo más mínimo) que precisamente la canción de esta preciosidad, "Boys", se ha convertido con el tiempo en un tema que adoro, ¡bueno, no voy a presumir de un gusto musical muy refinado, todo lo contrario!, la vivacidad de esa canción siempre me ha producido tal subidón que me ha servido como cura ante cualquier momento de bajón o decaimiento que me hubiese producido cualquier circunstancia en mi vida. Por eso, tengo que reconocer, que le he desarrollado un especial cariño a este despampanante icono ochentero. 

El "do" de pecho de Sabrina aquella Nochevieja de 1987

La prota, Gioia (Serenda Grandi,
de los grandi que tenía los melones)
Pues bueno, aquí traigo una peliculilla que cuenta con su presencia, breve, pero concisa. El film es un giallo, cuando dicho subgénero ya estaba en una fase de declive inevitable. Los buenos años del género de terror italiano se estaban evaporando y en su afán por retener un cierto halo de la grandeza que muchos realizadores como Mario Bava, Dario Argento o Lucio Fulci, habían demostrado con creces a lo largo de la década de los sesenta y setenta, con films muy potentes, sobre todo a nivel artístico y visual, aparecieron petardos como éste. Pues bueno, "Crímenes en portada" es un giallo menor, reflejo tristón de algún que otro clásico del género, dirigido por Lamberto Bava (hijo de Mario), cuya carrera, en la que abundan bodriacos bastante infumables (exceptuando algún caso como las dos partes de "Demons" o esa rareza llamada "Macabro''), no fue ni la mitad de prolífica ni interesante que la de su padre. Lo que nos cuenta este flojucho engendro, es la historia de la prestigiosa directora de una revista erótica, Gioia (interpretada por Serena Grandi), cuyas modelos femeninas comienzan a ser brutalmente asesinadas por un lunático, de identidad desconocida. La película en sí es muy, pero que muy pobre. 

A George Eastman, aún alejado de sus papeles
de voraz caníbal, se ve que le sigue molando la carne

Daria Nicolodi, mujer de Dario Argento
Destacan muy pocas cosas, porque en sí todos los elementos que hicieron grande al giallo en el pasado, se encuentran aquí reflejados de una manera a caballo entre repetitiva y poco resultona. Atrás quedaron aquellas preciosas fotografías coloristas y esos asesinatos brutales, viscerales y explícitos. La trama tampoco está muy bien llevada, abunda un erotismo muy marcado y muy poco interesante; constantemente estamos viéndoles las pechugas a todas las integrantes femeninas del reparto (no podía ser menos, a Sabrina también). Ni la presencia de algún que otro rostro conocidillo del género, véase George Eastman (el malvado de "Gomia, terror en el mar Egeo" y "Terror sin límite") o la mujer de Dario Argento, Daria Nicolodi, le suman algo de interés, ya que tienen intervenciones muy breves y nada llamativas. El suspense brilla por su ausencia y una vez se descubre la identidad del asesino y sus ridículas motivaciones, uno no puede hacer otra cosa más que descojonarse de la tomadura de pelo que en resumidas cuentas, acaba siendo este bodriaco. 

Así ve el asesino a sus víctimas

Sabrina rodeada de momias
Me pareció ciertamente llamativo el hecho de que el asesino ve a las modelos como monstruos horrorosos, antes de mandarlas al otro barrio. Pero por lo demás, la película es bastante mala. Lo único que a día de hoy, me sigue molando es la brevísima intervención de la propia Sabrina, la cual no supera los cinco minutos. Podemos verla, posando de manera muy sensual, y desnuda (¡claro!) en una sesión de fotos, rodeada de momias (las cuales, la acaban despojando de sus escasas ropas, ¡la pobre, iba a coger frío!); acto seguido podremos visionarla como Dios la trajo al mundo también (¡desde luego no destinaron mucho presupuesto para su vestuario!) dándose una duchita, siendo observada por el psicópata que posteriormente le dará pasaporte. La muerte de Sabrina es verdaderamente cruel y sádica, pues el criminal le llena la casa de avispas que acaban dejándola como un auténtico Cristo. En fin, pasada la oportunidad de hacerle un regalo a nuestra vista con la escultural figura de esta deslumbrante fémina, en sus buenos tiempos, pues lo que nos queda es un gran nada. Vamos, que en mi opinión, lo único que me ha llamado mínimamente la atención del film es que haya aparecido Sabrina, el resto mierda, mierda y más mierda. En resumidas cuentas, es un film que como giallo es una patata y como vehículo de entretenimiento es todavía más flojucho. 

El asesino al ataque

RECORDANDO A ESTE ICONO OCHENTERO:

''Boys Boys Boys (I'm looking for the good time)''

Pesadilla antes de Navidad (1993) de Henry Selick



''Cómo el Grinch robó la Navidad'' mediometraje animado
de 1966 fue una de las influencias de Tim Burton 
A pocas horas para pegarle un patadón al 2013, aquí sigo yo con el especial navideño y como no podía ser de otra forma, no podía faltar mi comentario a otro clásico enormemente entrañable; "Pesadilla antes de Navidad", un film de Tim Burton, pero sin Tim Burton. ¿Qué quiero decir con esto? Pues la concepción de "Pesadilla antes de Navidad" tiene su historia. Poco después de haber realizado su maravilloso corto "Vincent", a Tim Burton se le pasó por la cabeza realizar otro cortometraje animado, mediante la técnica de stop motion, que tanto le mola (y a mí particularmente también). Para ello quería adaptar un propio texto escrito por él, inspirado en la historia de "Cómo el Grinch robó la Navidad", ese ser siniestro que se marca como propósito robar la Navidad y en un cortometraje animado de los sesenta llamado "Rudolph"

"Rudolph" otro mediometraje realizado en stop motion en 1964,
que también fue una de las influencias de Tim Burton

Jack Skellington, el señor del Halloween
Así Tim Burton puso en marcha el proyecto llamado "Pesadilla antes de Navidad", y diseñó infinidad de story boards sobre él mismo, tal y como su imaginación concebía que sería visualmente. En aquel momento, principios de los ochenta, el señor Burton se encontraba trabajando para la factoría Disney, los cuales a presenciar el trabajo planteado por él, le echaron para atrás dicho proyecto. Obviamente, no era el estilo de animación que les caracterizaba y consideraron a "Pesadilla antes de Navidad" como un proyecto demasiado siniestro y no apto para el público al que habitualmente iban destinados los trabajos de la factoría. Así que la idea de "Pesadilla antes de Navidad" se quedó guardadita en un cajón unos cuantos añitos. Pero, al final de la década de los ochenta y el principio de la de los noventa fue un periodo muy fructífero para Tim Burton. Éste consiguió un auténtico triplete en las taquillas de todo el mundo, "Bitlechus", "Batman" y "Eduardo manostijeras" fueron éxitos tan magnánimos que colocaron al señor Burton en lo más alto de la cumbre hollywoodiense y fue cuando la Disney volvió a poner los ojos en él y optaron por rescatar aquel trabajo suyo primigenio que habían, con tanta dilación, repudiado unos cuantos años atrás. Así el nombre de "Pesadilla antes de Navidad" volvió a resonar y tras varias reuniones con Tim Burton, se aprobó desempeñarlo, pero esta vez para convertirlo en un largometraje. 

La tristona Sally, es la más sensata del pueblo de Halloween

El propio Frankenstein no le llega a los talones a este mad doctor
No obstante, era 1991 y Tim Burton ya estaba comprometido con el rodaje de "Batman vuelve" y claro, le era imposible afrontar ambos proyectos a la vez. Así fue como el propio Tim relegó su trabajo a un antiguo colega suyo y colaborador, Henry Selick, que se convirtió en la cabeza de dicho trabajo. El señor Selick, aunque tenía experiencia trabajando con la técnica stop motion en algún que otro cortometraje, iba a ser la primera vez que iba a enfrentarse a la realización de un largometraje y además, una realización bastante difícil. Hay que tener en cuenta que, debido a la técnica de animación en la que se rodó, hacían falta varios días para filmar unos escasos segundos del film. Pero el señor Selick lo tuvo muy claro, quería ser fiel al cien por cien al maestro que había concebido la idea inicial. Tomando como referencia los story boards que Tim Burton había desempeñado años atrás, él y todo el equipo se preocuparon en recrear la estética que tanto caracteriza los films de Burton, y todo sea dicho, no pudieron hacerlo mejor, porque "Pesadilla antes de Navidad" ha pasado a figurar como una de las pelis de Tim Burton más representativas, y aunque indudablemente, la idea salió de su cabeza, el señor Burton no tuvo nada que ver con su realización. Por este dato hay que darles un merecidísimo aplauso, tanto a los creadores del guión, como todo el equipo de maravillosos artistas que hicieron posible la creación de una absoluta obra maestra de la animación. 

Jack descubre la Navidad

Mitiquísimo plano de la película
La premisa que nos presenta la película, es una especie de fusión entre la aterradora festividad de Halloween y la emotiva y tierna que nos atañe, la Navidad. Nuestro prota es el perverso y marginado Jack Skellington, procedente del pueblo de Halloween, habitado por todo tipo de monstruos, brujas y seres infernales, los cuales disfrutan como enanos asustando a todo el mundo y llevando consigo todo tipo de pavorosas y diabólicas intenciones. No obstante, Jack sufre una especie de crisis personal; como la mayor parte de personajes protagonistas de las historias de Burton, es un ser que no se encuentra conforme en su habitat y busca desesperadamente algo nuevo que le dé sentido a su existencia. Parece que lo encuentra, cuando accidentalmente descubre la Navidad, procedente de un universo donde no existe la maldad, sino el amor y el cariño; y claro, los regalos. Desde su perspectiva, Jack pretende llevar dicha festividad a Halloween y por lo tanto convertirse él, en el nuevo señor de la Navidad, sustituyendo al propio Santa Claus. Así el pueblo de Halloween procederá a crear una nueva y perversa versión de la Navidad y ello dará lugar a una serie de atemorizantes y divertidas circunstancias.

Trío tenebroso; misión: ¡secuestrar a Satan Claus!
Jack sustituye a Santa Claus
Yo recuerdo que antes de verla, de pequeño, hubo quienes llegaban a asegurar que no era una película para niños, incluso hubo quien le aconsejó a mi madre que no me dejara verla porque era un film lleno de monstruos horribles y que podría causarme una desagradable sensación. Incluso llegué a oir que en unos cuantos cines, algunos padres tuvieron que sacar a sus hijos de la sala, debido a que la peli les daba miedo. Bueno, vamos a ver, obviamente "Pesadilla antes de Navidad" no es un film de animación al uso al que nos tiene acostumbrados Disney; un buen porrón de personajes son bastante siniestros y la ambientación, incluso algunas de sus canciones implican ciertos elementos vinculados con el género de terror. Pero vamos a ver, decir que es un film insano para los niños, desde mi punto de vista, es exagerar. Vale que también dependerá de la sensibilidad de los infantes que aborden su visionado, pero aún así no me parece una película que pueda llegar a causar traumas incurables en los más pequeños. A mí la verdad, me encantó cuando la vi, me pareció una película de animación como ninguna otra había presenciado y me fascinó. Sus personajes me parecieron entrañables y la historia enormemente entretenida.

El malvado Oogie Boogie disfruta haciéndole pasar al pobre Santa un mal rato

Amor siniestros
A día de hoy me sigue pareciendo fascinante, de hecho la he visto hace bien poquito que la han pasado por televisión y he visto intacta mi sensación de fascinación. El film visualmente es una obra de arte, desde luego lleva muy pero que muy marcado el toque característico de Tim Burton, lo cual demuestra una especial dedicación por parte de los realizadores, en ser fiel al espíritu del ideador de la historia. Aparte presenta una fusión increible de los elementos llamémoslos "aterradores" y humorísticos, incluso con algún que otro dramático y triste, procedente de la sensación de soledad de los personajes principales (típico como ya he dicho de los personajes burtonianos). No falta también una curiosa historia de amor, entre Jack Skellington y esa muñeca cosida (al estilo de la novia de Frankenstein) llamada Sally, la más coherente y bondadosa de la aterradora población de Halloween. Mención aparte merecen los espléndidos números musicales y correspondientes canciones compuestas, como no, por Danny Elfman (habitual de los films de Burton), consiguiendo además, en mi opinión, uno de sus más sobresalientes trabajos (junto con el de "Eduardo manostijeras"). En resumidas cuentas, "Pesadilla antes de Navidad" es una absoluta delicia, una joya de la animación, extraña, siniestra, tierna e inolvidable. Una obra maestra imperecedera, disfrutable por grandes y pequeños y generación tras generación, es de esos trabajos tan deliciosos que no tienen fecha de caducidad; es simplemente maravillosa.

La muerte del malvado mola un huevo

*MI MOMENTO FAVORITO: para mí el más divertido de la película, es cuando Jack, en su labor sustitutiva de Santa Claus, va entregando unos regalos navideños un tanto siniestros y desde luego, no a gusto de todos.

''Cariño, ¿qué te ha traido Santa Claus?''

lunes, 30 de diciembre de 2013

Jack Frost (1997) de Michael Cooney



El psicópata Jack Frost (Scott McDonald) siendo todavía humano
Y ya que he comentado la versión de "Jack Frost" infantil, pues ¿qué mejor momento para comentar también la otra versión existente con el mismo título y temática, pero orientada a un público más adulto (podríamos decir)? Desde luego la otra es más famosa, al menos por la cantidad de veces que la han emitido diferentes Navidades por televisión, pero curiosamente ésta se hizo antes, lo que me choca es que con una misma historia y título, se hayan podido hacer películas tan diferentes. Si la otra "Jack Frost" nos presentaba a un buen hombre reencarnado en un muñeco de nieve y cuyo único objetivo, era seguir manteniendo el amor de su hijo y su mujer, ésta nos muestra como el muñeco de nieve guarda el alma de un asesino loquísimo y perturbado, al que no le impedirá nada su nuevo envoltorio helado, el seguir cargándose a la peña allá donde vaya. Curiosamente, a este asesino, lo iba transportando la policía en un furgón, para ser encerrado en prisión, cuando tienen un accidente en el que el psicópata acaba fundiéndose con la nieve y mutándose en un inmenso muñeco de nieve (valga la redundancia) con muy malas pulgas. 

El asesino Jack Frost convertido en muñeco de nieve

El sheriff que capturó a Frost y su esposa
El lugar donde ha tenido lugar tal desgraciado incidente, está cerca de un pueblecito, que está celebrando las Navidades, en el que vive el sheriff, gracias a cuya colaboración dicho asesino (por cierto, de nombre Jack Frost), acabó entre rejas; así que el muñeco de nieve diabólico no perderá el tiempo en intentar cobrarse su ansiada venganza. En términos generales me recordó un poco a "Muñeco diabólico", véase un asesino humano, cuya alma mortífera habita otro recipiente (aparentemente inamovible), a través del cual seguirá matando. Al igual que Chucky, este Jack Frost, es un cachondo, utiliza mucho la ironía a la hora de matar y recurre frecuentemente al chiste, mientras realiza todo tipo de bárbara y sádica acción. 

Empiezan a ocurrir muertes misteriosas en el pueblo

¡Cuidado tío, mira detrás de ti!
El film es una baratísima producción de serie B (de hecho destinada al mercado doméstico), de una realización muy cutre y patatera. Véase, malísimos efectos especiales, malísimos actores y en resumidas cuentas, malísimo todo lo referido a la puesta en escena. Eso sí, la película es divertidísima. A pesar de su posible vinculación con el género de terror (y más concretamente con el slasher), debido a su temática, la película es imposible que a nadie le transmita la más mínima sensación de repelús (tampoco creo que fuese ésa la intención de sus realizadores). Es más bien una parodia y como tal, pues desde mi punto de vista, es efectiva a grandes rasgos, porque conseguir que te rías, lo consigue y en varias ocasiones. Es tan disparatada y tan loca, que a mí la verdad, me llegó a molar. Eso sí, ya lo digo, es mala, muy mala; la condición para que su visionado resulte agradable es no tomarla en serio en ningún momento, porque entonces os parecerá un film rematadamente absurdo. 

Sangrientas Navidades tenga usted...

...y usted también
A destacar, por encima de todo, el personaje de Jack Frost (y no por su diseño, el cual no puede ser más cutre), sino por su concepción de villano; es la chispa absoluta de la película, aparte de su sentido del humor macabro. También me parecen curiosas algunas de las muertes que este sádico asesino tan particular, irá ofreciendo ante la pantalla; aunque, repito, su elaboración es tan amateur que se ven indudablemente pobretonas a nivel visual, pues son tan exageradas muchas de ellas, que se acaban convirtiendo hasta en resultonas y peculiares (incluso las hay que no escatiman en gore). Señalar como punto fuerte del film que ni él mismo se toma en serio y adopta su lado paródico con total desfachatez. En fin, recomendable para todos aquéllos fanáticos de los films más casposetes que se pueda uno topar por ahí. 

Jack enseña los dientes

*Como curiosidad; sale la atractiva y sensual Shannon Elizabeth, siendo todavía bastante desconocida, quien posteriormente tendría su tirada cinematográfica participando en pelis como "American Pie" o "Scary Movie" y que además protagoniza una escena de lo más hilarante que señalo como mi momento favorito de la película. 

Shannon Elizabeth haciendo de cachondona

*MI MOMENTO FAVORITO: el hilarante encuentro entre la joven Shannon Elizabeth y el muñeco de nieve asesino, el cual le pega un buen meneo en la bañera. Tan demencial como divertido. 

Hombre, así la cosa resulta un poco fría

Jack Frost (1998) de Troy Miller



Jack Frost (Michael Keaton) cantando con su banda
Pues aquí otra de esas películas para niños, que como "¡Vaya Santa Claus!", parece no contar con el beneplácito de nadie, y curiosamente, también, según los comentarios que he leido sobre ella, parece no gustarle a nadie. Como siempre digo, aquí la peña a la hora de despotricar, parecen nunca tener en cuenta el tipo de film del que rajan de forma tan encarnizada. A mí "Jack Frost", pues la verdad, no es un film que me entusiasme, pero lo he visionado un par de veces y para nada me parece la insufrible mierda que muchos apuntan por ahí. Es un film destinado a los más pequeños, ambientado en Navidad y como tal es una película de consumo fácil idónea para las propias fechas navideñas; lo cual no me parece sinónimo de mojón desdeñable. 

Aquí está la Navidad

La mujer y el hijo de Jack
(Kelly Preston y Joseph Cross)
El film nos presenta una historia vista en ya muchos otros del estilo, en el que su protagonismo principal es transmitir un poquito de espíritu navideño a todo aquél que se sienta a echarle un vistazo. La historia va de un cantante, Jack Frost (interpretado por Michael Keaton, protagonista de "Bitelchus" y las dos partes de "Batman" dirigidas por Tim Burton), que está siempre tan ocupado que no consigue sacar mucho tiempo para poder disfrutar de su hijo Charlie (Joseph Cross), a pesar de que se desvive por él. El sentimiento es mútuo, porque Charlie adora a su padre, lo cual le potenciará el desolador drama que vivirá el chico cuando su padre muera en un accidente de coche. Pero, la tristeza no durará mucho, ya que esas Navidades, Jack volverá, eso sí reencarnado en un simpático muñeco de nieve. 



Jack y Charlie haciendo un muñeco de nieve

Tras su muerte, Jack volverá reencarnado en el muñeco de nieve...
Lo que nos depara su visionado serán los temas afines a todo tipo de pelis navideñas, amor, cariño, familia, cierto halo de magia, emoción, y todas estas cuestiones. Y aunque he dicho que a mí particularmente, tampoco me encanta el film, sí que voy a romper varias lanzas a su favor, viendo la ferviente cantidad de enemigos que ha cosechado y el afán con el que éstos la ponen a parir. Ya he dicho muchas veces, que cuando uno va a ver una película así, ha de saber que fijo, pero fijo, se va a encontrar con escenas de sentimentalismo gratuito y sensiblería a la par, así que a quein todavía a estas alturas le pille esto de sorpresa, me parece que debería de espabilarse un poquito, porque muy avispado no es. Los hay que también parecen buscar en estas películas, algún tipo de reflexión profunda o alguna de estas mierdas que tan cool les hace parecer a los típicos intelectualoides que van de críticos, bueno, yo a éstos les diría ¿pero qué queréis ver en una película sobre un hombre que vuelve de la muerte convertido en un muñeco de nieve parlante?, ¿algún ensayo sobre alguna de la teoría darwiniana del origen del hombre? 

...y volverá a hacer tan buenas migas con su hijo como cuando era humano

Mac (Mark Addy), gran amigo de Jack en vida
Por favor, un poquito de seriedad y estemos a lo que estamos. La película se puede ver perfectamente, sin riesgo a volverse mongólico. No es un espectáculo deplorable ni vergonzoso, en sí, trata un historia bastante bonita cuyo motor es el amor incondicional del padre por un hijo, que traspasa los límites de la vida (¡qué bonito me ha quedado!). El hecho que el hombre se convierta en muñeco de nieve, pues me parece una maniobra simpática, porque el personaje es molón y bastante divertido a veces. Los actores cumplen perfectamente (como siempre digo, ni para darles un Oscar ni para despotricar contra ellos, para esto último están los más memorables papeles de Penélope Cruz), a nivel visual la peli es funcional, posee correctos efectos especiales y una historia con el suficiente ritmo para resultar entretenida. En fin, que si bien "Jack Frost" no es una maravilla digna de vitorear, tampoco es un mojón como muchos otros que hay que sí que glorifica la crítica. Pero claro, al ser un film familiar, es fácil tacharlo de idiota y cargársela a base de comentarios primordialmente negativos. Destinada sobre todo a los más pequeños, y por supuesto, de consumo específico en estas fechas (verla en cualquier otra época del año, pues la verdad, tampoco tiene mucho sentido), pero en cualquier caso, cumple bastante bien como película de sus características, ni más ni menos. 

De paseo con la mascota

*Como curiosidad, me llama la atención que ya existiese otra película anterior titulada "Jack Frost"  de 1997 y que además también trata sobre un muñeco de nieve viviente; eso sí, dicho film está tratado desde un punto de vista más cercano al género de terror, porque el muñequito posee el alma de un asesino de aúpa. 

Pasándolo pipa en la nieve
*MI MOMENTO FAVORITO: llamadme tonto, pero la preciosa escena final, que supone el breve reencuentro con toda la familia, casi me hizo hasta derramar una lagrimita. 

Siempre es triste decir adiós

domingo, 29 de diciembre de 2013

Escalofríos (2007) de Gregory Jacobs



Los dos chavales protagonistas (Ashton Holmes y Emily Blunt)
¡Qué grandísima decepción me llevé con esta película! Vamos a ver, no me esperaba un peliculón, pero por lo que había leido sobre el argumento y lo que era la propuesta, me parecía un film a priori, bastante atractivo. La historia nos cuenta el desafortunado viaje de una joven (Emily Blunt), que pretende llegar hasta Delaware para pasar la Nochebuena con su familia. Como está estudiando bastante lejos, pretende tomar el autobús y pasarse unas cuantas horitas aburridas de viaje. No obstante, como última opción se entera de que un chaval (Ashton Holmes), se ofrece a ir en coche precisamente hasta Delaware, compartiendo gastos con un acompañante. La chica por lo tanto, ve la posibilidad de ahorrarse un dinero y requiere los servicios del chaval. Arranca el film y parece que va a deparar un espectáculo ciertamente vibrante y repleto de suspense, sobre todo cuando el chico parezca ocultar un objetivo extraño y siniestro, para llevar a la chica. Cuando ella lo descubra comenzará a desconfiar de él, lógicamente, porque no tiene pinta de que esté precisamente en sus cabales. La cosa se complica, el chico toma un atajo en medio de la nieve, alejándose de la autopista. Para colmo de males, los arrolla otro vehículo y tienen un accidente. Ambos se quedarán atrapados en el coche, que no arranca, en medio de un temporal de nieve y a unos cuantos grados bajo cero. Aquí no acaban los problemas, el chico se muestra especialmente obsesionado por la chica, y le confiesa que dicho viaje había sido un pretexto para quedarse a solas con ellas durante un tiempo, lo cual inquieta más a la chica. Pero por si no es bastante follón, descubrirán que por la zona pululan una especie de presencias amenazadoras e inquietantes, que no parecen de este mundo. Dicho todo esto, ¿a que la cosa pinta bien, eh? Yo así lo pensaba, porque contaba con esta información y me dije: ''joder, pues buena pinta tiene''.

Los chicos a punto de emprender viaje juntos

Una siniestra carretera
Bueno, pues naranjas de la China. La película es un auténtico tostón. No puede estar más mal llevada y todas sus posibilidades a la hora de causar inquietud, peor explotadas. El tema del chaval y su posible personalidad psicopática queda vergonzosamente disuelto en una trama que se torna absurda a raíz de la inclusión del terror sobrenatural. Unos ligeros toques de survival que posee el film, se ven lamentables, y digo lamentables, porque realmente tenían un excelente escenario para poner a los protagonistas en un aprieto tan chungo que no se logra transmitir al espectador; y es el enfrentarse con la propia Naturaleza y el peligro de morir congelados dentro de un coche a una temperatura bajísima a causa de un temporal de nieve. Pues no, se desaprovecha debido a un aburrimiento extremo, un ritmo pausado que estanca la pelicula y que logra que desconectemos alrededor del minuto 40 aproximadamente. Pero todavía es peor la trama sobrenatural. Resulta que la prota descubre que el lugar en el que han sufrido el accidente, ha sido también el lugar en el que periódicamente, año tras año, se han producido otros accidentes similares. ¡Al lorito! Ronda por ahí el espíritu de un sheriff cabrón, que en los cincuenta, asesinaba gente en ese mismo sitio y luego se deshacía de los cadáveres. 

Atrapados en la nieve

Siniestras apariciones
No quedó aquí la cosa, cerca de ahí había una cabaña habitada por unos monjes palurdos que dejaron morir al sheriff asesino, dentro de su coche en llamas, después de que éste sufriese un accidente; también en dicho lugar, ¡joder con el sitio! En base a estos datos, podemos intuir, porque nunca se nos explica en la mierda de guión que presenta el film, que el espíritu del sheriff es el que causa cada año el choque de diversos choques en ese mismo desvío; se ve que aún muerto sigue siendo un hijo de puta. También se deja intuir, que dicho espíritu provoca la muerte de los accidentados por medio de congelación, lo que logra con tan sólo tocarlos. Por ahí también se pasean los espíritus congelados de los monjes que no lo socorrieron en vida, supuestamente fue el sheriff quien los congeló, porque así es como se muestran, como témpanos de hielo andantes. Pero es que también, de vez en cuando se dejan ver los fantasmas de las antiguas víctimas del poli, sin ningún tipo de coherencia. Entre el barullo, la prota, intentará escapar una y mil veces del lugar del accidente, en medio de la tormenta de nieve, pero por alguna razón no consigue salir del puñetero lugar en cuestión y siempre acaba volviendo a él. 

Tieso como un palito de pescado

''Señor, ¿puede usted ayudarme?... ¡Oh, no!, ¡mejor no!''
Al final, y sí lo destripo para ahorraros la molestia de ver esta mierda, pasa la noche, sale el Sol y la chica, única superviviente, porque el supuesto chaval psicópata se congela, se escapa como si nada y es rescatada. ¡Tócate los cojones! Tragarte hora y media de truño lamentable para que no haya ninguna explicación y que te suelten ante las narices una historia llena de incongruencias demenciales. El film plantea un sin fin de incógnitas, consecuencia de un trabajo de guionización estúpido y confuso. Por ejemplo, ¿por qué cojones el chaval tomó ese desvío, directos a darse la ostia, sin ningún tipo de motivo aparente?, ¿cómo es posible que el espíritu del sheriff fuese capaz de provocar el choque que provocó que los chicos se saliesen de la carretera?, si se parte de la base que dicho desvío está condenado a sufrir periódicamente varios accidentes, ¿por qué las autoridades no hacen algo para impedirlo, no sé, por ejemplo potenciar la vigilancia?, ¿cómo demonios pueden seguir estando los cadáveres de los monjes en el mismo sitio donde se congelaron años atrás sin que nadie los haya descubierto? y lo más chocante ¿por qué cojones el malvado sheriff no congela a la protagonista, con la cantidad de ocasiones que se le presentan y opta por dejarla escapar como si nada? En fin, tal cantidad de subnormalidades que me parecen que lacran un film con muchas posibilidades para haberse convertido en un modesto thriller, o incluso un decente survival. No obstante, optaron por cagarla metiendo una trama irrisoria y sin sentido que ni tan siquiera resulta lo más mínimamente interesante como para entretener. Conclusión, es una mierda como un piano; una porquería que no merece la pena ni molestarse en visionar, afortunadamente está más que condenada al más merecido de los olvidos.

Los chicos dándose calor para intentar no congelarse