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domingo, 23 de febrero de 2014

Romeo y Julieta (1996) de Baz Luhrmann



Julieta (Claire Danes) en las nubes
Recuerdo hace un porrón de años que esta película fue la causa principal de que la cara de Leonardo DiCaprio empezase a aparecer en todas las carpetas de las adolescentes de aquel momento. Yo era un crío y me chocaba ver tanto el rostro de este rubiales, que por ese instante, pues no tenía ni idea de quien era. No obstante, yo era muy curioso y enseguida indagué por mi cuenta y descubrí que era el prota de una peli llamada "Romeo y Julieta", gracias a lo cual a su vez descubrí que existía la famosa obra de Shakespeare, ¡lo que son las cosas! Poco después comenzó a sonar constantemente en todas las emisoras de radios musicales, una genial canción llamada "Lovefool" de Cardigans, que me encandiló. Esa canción me pareció genial y siendo un crío me volvía loco, no porque lógicamente entendiese ni papa de lo que decía, sin más la vocecilla de la cantante y su vibrante ritmillo me fascinaban. A todo esto, me enteré que pertenecía a la banda sonora de esta película, lo cual en cierto sentido, me proporcionó un cierto interés por visionarla. Bueno, se me presentó la oportunidad cuando la emitieron, recuerdo muy bien, por Canal +, allá por alrededor de 1997 (yo tenía 9 años), e hice la intentona de verla. No obstante, me pareció algo tan bizarro y tan estrafalario, que en poco tiempo, dicho interés se vio fulminado de raíz; concretamente al ver la escena del negro travestido bailando y cantando como una reinona. Bueno, desestimé el hecho de visionarla enteramente en un tiempo inminente y en no mucho, para mí este "Romeo y Julieta" cayó en el más absoluto de los olvidos. 

Romeo (Leonardo DiCaprio, quien se convirtió en el icono para
féminas adolescentes por excelencia en ese momento)

El papi de Julieta (Paul Sorvino, en una
bochornosa y vergonzosa performance)
Así pues, pasaron los años y ya teniendo consciencia de la existencia del texto inmortal de Shakespeare, y tras haber visionado alguna de las versiones cinematográficas de la misma, fue cuando, y como siempre digo, por mera curiosidad cinematográfica más que por gusto personal, me decidí entonces a verla, pero en serio, teniendo constancia de que se trataba de una adaptación un tanto kitsch y moderna de la historia clásica de esta pareja de tontuelos enamorados. Curiosamente ese mismo año apareció un experimento un tanto similar, por parte de la irreverente productora Troma, llamado "Tromeo y Julieta", la cual aunque difiere mucho del tono de esta versión, sí guarda en común con ella, el hecho de desarrollar la historia en un ambiente urbano y con personajes pandilleros un tanto peculiares. 

Pero vamos, que la de este drag queen negro (Harold Perrineau)
 se queda atrás en el amplio universo del ridículo 

En fin, que sin miramientos un día me la pillé en el videoclub (todavía no estaba en su mero apogeo eso de descargarse pelis de Internet, aunque ya se comenzaba a ver) y me dispuse a visionar este masivo derramamiento de babas por parte de las féminas adolescentes de finales de los noventa. Bueno, puedo decir sin tapujo ninguno, que para mí resultó una experiencia más que desagradable. En serio, ¡vaya mierdón de película! Lo grotesco cobra otro sentido observando el puñado de avergonzantes fotogramas que construyen esta oda al ridículo. El hecho de ver a pandilleros chungos hablando como los personajes clásicos de Shakespeare, emitiendo versos en rima y una prosa lírica repelente, me resultó el colmo de la vergonzoso. 

Anda que no vi veces esta escena en el videoclip de "Lovefool" de Cardigans

Romeo y Julieta dándose cariñitos
Esta versión de "Romeo y Julieta" por momentos me pareció un espectáculo de la cabalgata del Día del Orgullo Gay, escenas como el papi de Julieta (un Paul Sorvino sin el más mínimo sentido del ridículo) haciendo una puesta en escena esperpéntica como un travestido puretón o la ya nombrada escena del negrito haciendo oda al universo drag queen, me pareció eso, esperpéntico. La película no puede ser tomada en serio, es meramente absurda. El componente supuestamente dramático de la trama se ve por completo anulado, así que ese romanticismo rancio un tanto efectivo, teniendo en cuenta los cánones de la época, presente en otras adaptaciones más puramente fieles a la obra de Shakespeare, aquí no sólo se torna empalagoso, sino directamente insoportable. La química entre DiCaprio y Claire Danes, es nula (no por culpa de ellos, los cuales, pues bueno, hacen lo que buenamente pueden), debido a un guión de mierda. 

La panda de chunguetes y horteras coleguitas de Romeo

Como adaptación de "Romeo y Julieta" me parece de lo peorcito visto en el Séptimo Arte, aunque curiosamente parece ser que es de las más recordadas (en parte en entendible y es que DiCaprio tuvo su tirón). Como película me parece una infumable mierda, un montón de estiércol me produce la misma sensación de repelente asco que esta abominación mal parida. El futuro director de "Moulin Rouge" se puede enorgullecer de haber cagado un feto fílmico abominable. Es de esas cosas tan repugnantes, tan empalagosas y tan estúpidas que uno debe concienciarse mucho para conseguir acabar de ver sin vomitar por el tan estruendoso absurdo reinante. Vuelvo a decirlo, ¡qué pedazo de mierda, Dios! 

Momento de exclamar: "¡moríos de una puta vez y que se acabe este mojón ya!''

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