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Cleopatra (una seductora Claudette Colbert) |
Estamos en Semana Santa, época del año
idónea para recordar esos míticos films épicos que tantas y tantas
veces hemos visto (aunque fuese de refilón) emitidos por la tele.
Aquí traigo una superproducción de la época dorada de Hollywood,
un clásico bastante olvidado en especial debido a la magnánima
atención que acaparó su posterior versión de 1963 protagonizada
por Elizabeth Taylor.
''Cleopatra'' es una excelente joyita de cine
épico, orquestada por el profesional Cecil B. DeMille (experto en
producciones de lo más rocambolescas y cargadas de parafernalia
visual). En ella se nos relata la historia de la sensual y apasionada
reina egipcia, la cual fue capaz de hacer postrar a sus pies a dos
rudos dirigentes del imperio romano, el emperador Julio César y
soldado Marco Antonio. La
performance de Cleopatra corrió a cargo de
una deslumbrante Claudette Colbert, actriz encumbrada en dicho
momento en Hollywood (de hecho el mismo año, en 1934, se hizo con un
Oscar a la mejor actriz por la rancia comedia
''Sucedió una noche'').
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Cleopatra se camela al emperador Julio César (Warren William) |
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Al pobre Julio lo van a dejar como un colador |
Sé que a día de hoy cuando se menciona a Cleopatra en el
cine, a todos se nos viene a la cabeza la imagen de Elizabeth Taylor,
la cual ha quedado más mitificada dentro del Séptimo Arte, aunque
debo decir que Claudette Colbert nada desmerece en su encarnación de
la reina de Egipto. Colbert resulta provocadora y sensual (de hecho
es increíble lo subiditas de tono que resultan algunas de las
escenas en las que la protagonista se ve envuelta de connotaciones de
carácter sexual -así como sus ceñidos modelitos-, teniendo en
cuenta la época de realización del film, más cuando ya había
comenzado la aplicación del restrictivo código Hays), y magna en
todas facetas que va representando su personaje; dominadora,
seductora, apasionada, etc. El resto del reparto se limita a cumplir
de manera decente con las respectivas exigencias de sus personajes,
sin resultar ninguno especialmente llamativo en comparación con la
figura estrella femenina.
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Lujosísima puesta en escena |
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El rudo Marco Antonio (Henry Wilcoxon) también
caerá rendido ante los encantos de Cleopatra |
El film resulta ameno y efectivo a la hora
de entretener, es más siendo sinceros, lo devoré con más
entusiasmo que el mamotreto excesivamente alargado que supone la
versión de Mankiewicz de 1963, en el básicamente se cuenta lo mismo
(obvio, ¿no?), pero aquí más escueto y simplificado,
afortunadamente (y es que siempre insistiré que cuatro horas para
una película es excesivo, se mire por donde se mire). En cuanto al
apartado visual, la película se lleva la palma. Muy en la línea que
caracterizaba a su director, ''Cleopatra'' representa un lujoso
despliegue de medios (recalco, teniendo siempre en cuenta las
limitaciones de la época y el porrón de años que ha pasado por
ella); su dirección artística es brillante (pasando por alto que a veces los escenarios canten que son de cartón piedra), ídem de la preciosa
fotografía en blanco y negro (premiada con un Oscar), diseño de
vestuario y cuidadas escenas de acción (el tramo de la batalla
final, es prodigioso, sobre todo gracias al uso de un ágil montaje).
En líneas generales, estamos ante una ejemplar muestra de cine
épico, ciertamente el paso del tiempo ha hecho mella en ella en
varios aspectos (algo inevitable), pero a grandes rasgos creo que
perfectamente puede seguir siendo disfrutada hoy en día, en especial
por esos admiradores del buen cine clásico.
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Cleopatra aguarda espléndida (como siempre) un cruel destino |
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