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lunes, 2 de marzo de 2015

Días de placer y agonía (1983) de Adnor Pitanga



La prota, Marilia (Rossana Ghessa)
La existencia de este film brasileño llegó a mi conocimiento a través de cierta página experta en cine fantástico y de terror y me llamó especialmente la atención a priori, porque argumentalmente parecía reflejar que seguí una línea muy cercana al giallo italiano (cierto ramalazo, efectivamente, no le falta). Así que me dije, ¿un giallo hecho en Brasil?, puede resultar algo curioso de ver. Para mi sorpresa, también debo decir que no me costó localizar el film en castellano (mismamente, se halla en youtube -no sé si debería de haberlo dicho-), aunque eso sí en una calidad pésima (un VHS muy chungo). Pero bueno, ya digo de antemano que no merece la pena dedicarle ni un cuarto de hora, porque ''Días de placer y agonía'' es una soberana mierda. A grandes rasgos presenta una especie de trama de misterio, una mujer (la italiana Rossana Ghessa) y su amante (Anthony Steffen, rostro típico de los spaghetti western y de algún que otro giallo), se verán envueltos en medio de una serie de asesinatos (sobre todo de mujeres muy desinhibidas), en las cercanías a la propiedad de ambos.

¡Qué manos más largas!

Esta pobre pierde la ropa muy fácilmente
El film es un tontón, más que un giallo (que al final no acaba pareciéndose ni lo más remoto a uno, a excepción de cierto asesinato perpetrado por una navaja de afeitar -arma característica del subgénero italiano-) es un film erótico softcore, en el que el 90% de su contenido son letárgicas escenas, sin ton ni son, de retoces guarrindongos entre chavalucas (que pierden la ropa con extrema facilidad), sobre todo de alto contenido lésbico. De traca es la escena en la que la prota se lo monta con su mejor amiga, en presencia del marido de la segunda, que es ciego y el tipo permanece ahí impasible, mientras su esposa se calca a la otra. La película es un plomo, los intérpretes son una puta mierda (en especial la tipa que se pasa media hora corriendo por el bosque dando chillidos y cuyo top se le va bajando para dejar al descubierto sus pechos), el argumento es infumable y la realización está al nivel del despropósito general. En resumidas cuentas, es una bazofia lamentablemente mala, de ésas que se merecen ir al cajón de mierda, para posterior extinción de la faz de la Tierra.

Muerta a machetazos

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