Parking 2 (2007) de Franck Khalfoun

Angela (Rachel Nichols) trabajando hasta tarde hasta en Nochebuena

Una grata, más bien una gratísima sorpresa me llevé con esta peli de terror navideño. Una película que no gozó de mucha popularidad ni apogeo en su estreno, ni ha sido vitoreada como un gran film de terror; más bien todo lo contrario, los críticos han sido bastante reacios a darle su visto bueno y que en su mayoría ha sido tachada de una cinta más de terror tontorrón y facilón; pues yo lo digo bien alto y bien claro: ¡a mí me ha encantado! Me ha parecido un excelente film plagado de tensión, muy bien realizado y muy pero que muy potente. Yo la verdad quedo a cuadros cuando me topo con críticas especializadas señalando lo buenísimos que son otros films de terror como "Mamá" o "Expediente Warren", para mí dos mojones de lo más sobrevalorados y dos de los éxitos del género más incomprensibles y mierderos de la última década. En cambio, observo con total asombro, como se denosta una película como "Parking 2", la cual (obviamente cuestión de gustos), me parece un excelente ejercicio de buena puesta en escena en materia de terror, sabiendo emplear a la perfección los elementos que componen el relato. La historia es bien simple, pero también resulta igual de efectiva. 

Cuando la joven quiere irse a casa se encuentra todo el edificio cerrado

Thomas (Wes Bentley), el guarda, parece
un chaval muy amable, pero no lo es...

Una mujer, Angela (Rachel Nichols), trabajadora de un enorme edificio de oficinas, se dispone a ir a cenar con su familia en Nochebuena. Resulta, que se le echa el tiempo encima y, debido a su tardanza para salir del trabajo, se encuentra todo el edificio vacío y todas las puertas cerradas. El único que permanece aún allí es el amable guarda de seguridad del parking (Wes Bentley), quien se ofrece gustosamente a ayudarla a salir de allí. No obstante, durante unos minutos de conversación, el chico le propone a Angela cenar con él. La chica se lo toma a guasa, pero pronto se dará cuenta que el chaval no está bromeando. Cuando la chica, obviamente, deniega su oferta, no podrá imaginarse en ningún momento lo mal que este tipo se lo tomará. Este capullo, llamado Thomas, es en realidad un perverso demente que para colmo, está obsesionado con ella. Ni corto ni perezoso, la dormirá con cloroformo y la secuestrará, para ver realizado su sueño de que la chica se convirtiese en su acompañante durante la cena de Nochebuena. La pobre se dará cuenta, que no seguirle la corriente a este chalado, pondrá en serio peligro su vida. Hasta un punto en el que no le quedará otra alternativa que plantarle cara, mediante violentas técnicas, si pretende llegar con vida al año que viene. 

...está como una puta cabra y secuestra a Angela...

...quiere que ella cene con él en Nochebuena

La película en cierto sentido me ha recordado algo a "El coleccionista" de William Wyler, véase la historia de un lunático que se obsesiona con una chica, y decide secuetrarla y retenerla a su lado como si ella fuese un mero objeto que él mismo coleccionase. Aunque obviamente, a medida que avanza, va tomando otros derroteros, puesto que en el film de Wyler, observaremos como la víctima femenina acabará siendo víctima (valga la redundancia) de una especie de "síndrome de Estocolmo" y terminará estrechando cierto lazos con su secuestrados. En "Parking 2" esto no pasa ni de coña, sino todo lo contrario y seremos testigos de un auténtico survival, con el edificio de oficinas convertido en todo un campo de batalla en el que la chica peleará por su vida, siendo perseguida por un peligrosísimo psicópata. 

Las cosas se irán poniendo más y más feas...

...el tío se mostrará cada vez más y más loco...

En sí el film nos plantea un juego de "el gato y el ratón", pero excelentemente construido y sin dudas, en mi opinión, muy pero que muy atrapante. A mí logró engancharme desde el minuto uno, gracias a sendos aciertos que son dignos de destacar. En primer lugar hay que elogiar la interpretación del dúo protagonista, la chica Rachel Nichols (vista por ejemplo en otro film del género, "La morada del miedo"; remake de "Terror en Amityville") hace un papelón y consigue que nosotros los espectadores, acabemos sudando la gota gorda con ella, viéndola en innumerables aprietos a lo largo del film. No se queda atrás la actuación de Wes Bentley (recordado por su encarnación de otro chaval mal de la chola en "American Beauty"), quien aborda un excelentísimo papel de villano; un loco perturbado que nada le tiene que envidiar al mismísimo Norman Bates. El toma y daca de ambos personajes a lo largo de la trama es lo suficientemente potente como para que te quedes ensimismado al sillón durante la hora y media de duración, pero todavía hay más. La ambientación de la película me parece prodigiosa; el escenario del parking resulta aterrador, ídem puede decirse del ascensor en el que en determinado momento la protagonista es retenida por el psicópata, y así sucesivamente cada uno de los mortales rincones del edificio en el que se desarrolla la película, que a nuestros ojos se acaba volviendo una trampa mortal como pocas. 

...y Angela tendrá que terminar peleando para sobrevivir

El loco controla a Angela a través de las cámaras de seguridad...

Destacar al mismo tiempo que además, lejos de ser una película cándida o light, nos deleita con escenas gore fuertecillas, francamente creo que no eran en sí necesarias, ya que prescindiendo de ellas, el film no habría perdido efectividad debido al magnífico juego de suspense aportado, pero bueno, se agradecen las agallas de sus realizadores. En este aspecto se nota la mano francesa en el proyecto, ya que el mismo realizador de la salvaje "Alta tensión", Alexandre Aja anduvo inmiscuido en la elaboración del guión de la misma. En resumidas cuentas, a mí me pareció un peliculón. Ni de coña me esperaba que me iba a gustar tanto, de verdad, en mi opinión es uno de los mejores films de terror realizados en la década de los dos mil, la cual no se ha caracterizado por la existencia de buenas películas de este género, sino todo lo contrario. Un film denostado e infravalorado, que sin embargo cumple, desde mi punto de vista, unos objetivos fundamentales, lograr dar mal rollo y por encima de todo, entretener y de nuevo repito, la hora y media que dura se pasa como un brevísimo suspiro. Magnífica, una película tan buena como desconocida; desde luego yo la recomiendo con mucha estima, porque sin lugar a dudas, merece mucho la pena. 

...pero ella sabrá defenderse bien

*MI MOMENTO FAVORITO: uno de los más violentos del film, aquél en el que el psicópata, Thomas (Wes Bentley), someterá a un sangriento castigo a un jefe de Angela, el cual en determinada ocasión se había pasado sobeteándola. Pues bueno, el chico lo dejará completamente para el arrastre, después de darle una buena somanta de palos y arrollarlo con un coche; todo ante los aterrorizados ojos de ella.  

Ahí se deja asomar el gore