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lunes, 11 de enero de 2016

Esquizofrenia (1976) de Pete Walker



La asustada protagonista, Samantha (Lynne Frederick)
R.I.P. (1954 - 1994)
Como todo buen aficionado al género que se precie sabrá, el inicio del slasher definido como tal se apunta en 1978 con la genial ''La noche de Halloween'' de John Carpenter, donde el psicópata Michael Myers inició toda una larga serie de asesinos enmascarados que derramaron sangre por doquier en la pantalla. Aunque, antes de esta prodigiosa obra ya existieron unos cuantos antecedentes, veamos por ejemplo la italiana ''Bahía de sangre'', la también obra cumbre del género ''La matanza de Texas'' o la genuina ''Navidades negras'', y desde Reino Unido también tenemos ésta. ''Esquizofrenia'' no es un slasher al uso, es más bien un thriller psicológico, pero es indudable que posee indudables ramalazos a lo que vendría a definir el subgénero de puñaladas. El film es la mar de interesante, nos muestra una trama atrapante, un guión enrevesadillo que logra enganchar con facilidad (con cierto toque giallistico, de hecho es bastante deudora de ''Rojo oscuro'') y unas cuantas escenitas potentes. La historia nos cuenta como una joven vive traumatizada por una terrible experiencia de la infancia. 

El entorno de Samantha se convertirá en una pesadilla

Acojonante sesión de espiritismo
Su madre fue asesinada por un loco sádico que posteriormente fue encerrado en prisión. Ahora, años después, este psicópata está en libertad y parecer ir tras ella. Alrededor de nuestra sufrida protagonista irán cometiéndose una serie de sangrientos asesinatos, mientras ella comienza a estar cada vez más y más acojonada, temerosa de que el psicópata acabe con su vida. La película posee detalles muy acertados, aparte de argumentalmente, también desde el punto de vista visual, está rodada con profesionalidad y elegancia (los planos subjetivos que muestran el punto de vista del criminal seguro influenciaron bastante a Carpenter, a la par de otros aspectos de los que ''Halloween'' tomó muy bien el testigo). Los actores están bien, el final es sorpresivo y los asesinatos son lo suficientemente gráficos (aunque sin excederse con el gore) como para resultar la mar de potentes. 



Creo que es una película que ningún fan del slasher se puede perder, como antecedente es bastante sorprendente, la pena es que a día de hoy ha caído bastante en el olvido y es un tanto difícil de localizar (ya se sabe, a no ser que se tire de emule o similares). Sin lugar a dudas es una joyita obsoleta muy pero que muy recomendable. 

Los crímenes no cesan

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