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lunes, 7 de abril de 2014

La Cenicienta (1950) de Clyde Geronimi, Wilfred Jackson, Hamilton Luske



Cenicienta es despertada por sus amigos los pájaros
"La Cenicienta" fue una película muy significativa para mí, y es que fue nada más y nada menos, o al menos hasta donde mi memoria es capaz de recordar, la primera película que vi en mi vida. Esto fue debido a que coincidió que en 1992 se sacó una edición en VHS (a la cual pertenece esta carátula que incluyo en la reseña), y a mí con unos cuatro añitos, me la regalaron mis padres, para así de paso estrenar el reciente vídeo que acababan de comprar. Así pues con este entrañable film de animación inicié mis andanzas en el mundo cinematográfico que tanto me fue fascinando con el paso de los años. Por esta cuestión, es imposible que mi cariño por esta película no sea inmenso e indescriptible. "La Cenicienta" fue uno de esos clásicos que a Walt Disney le fue imposible llevar a cabo por diversas cuestiones durante los años de la Segunda Guerra Mundial, después de "Bambi" en 1942, el señor Disney se había volcado mucho en las adaptaciones al universo animado de cuentos populares, así se barajaron algunas propuestas como "Alicia en el país de las maravillas", "Peter Pan" y la propia "Cenicienta".

Los ratoncitos Jack y Gus son unos auténticos cracks

No obstante, fue un período complejo para los estudios y la producción de largos animados se volvió un tanto complicada; así que entre el año 1942 y 1950, la inexistencia de películas animadas (me refiero a largometrajes centrados en una historia) fue nula, las películas de la Disney que vieron la luz en este tramo fueron o bien films protagonizados por personajes de carne y hueso, en los que se llegó a experimentar con la animación también en películas por desgracia hoy muy olvidadas como "Canción del sur" o "Los tres caballeros", o sino recopilaciones de historias cortas (hasta alcanzar la duración de un largo), como "Las aventuras de Bongo, Mickey y las judías mágicas"

La madrastra y las hijas, ¡menudo trío de guarras!

Lucifer, su nombre le hace justicia a este lindo gatito
"La Cenicienta" supuso por lo tanto, el regreso de un largometraje íntegramente animado (como habían sido "Pinocho", "Dumbo", etc), que durante casi diez años la Disney no había vuelto a realizar y además también supuso un grandísimo éxito, como los que hacía tiempo la productora no había cosechado y uno de sus clásicos más entrañables y representativos. De hecho, el propio Walt Disney llegó a declarar que, de todas las que había hecho, ésta era sin dudas su favorita. Bueno me imagino que todo, absolutamente todo el mundo en la Tierra, conoce la historia; una joven maltratada por su infernal madrastra y consiguientes hermanastras, un trío de hijas de puta malparidas que la tienen como la sirvienta de la lujosa casa en la que viven. La muchacha sin embargo acepta con absoluta filosofía su condición y lejos de deprimirse se adentra en su mundo de fantasía e ilusión. Llegado un momento, se le presentará la oportunidad de conquistar a un príncipe, en el consiguiente baile, al cual podrá ir gracias a la intervención de la bonachona hada madrina que le proporcionará vestuario, carroza, cochero y lacayo hasta la media noche, en la que el encantamiento se romperá y un simple zapato de cristal marcará el destino de la chica y su oportunidad de ser feliz de una vez.

Cenicienta ve muy lejos su sueño de ir al baile del Palacio Real

Pero su hada madrina le dará esa oportunidad con el
"Sala cabula, chachi comula, bididibadidibu"
La historia está tomada de un cuento, cuya versión oficial más conocida fue la escrita por el francés Charles Perrault (en el siglo XVII), aunque existen cientos de versiones, ya que por lo visto el cuento data de inmemoriales siglos atrás. Por lo visto, este señor convirtió su versión del cuento en un edulcorado entretenimiento de tono más infantil, ya que en la línea de todo cuento clásico "para niños", la tradición narraba la historia con tintes más perversos y diabólicos. Algunas versiones incluían que Cenicienta aparte de sirvienta hacía otro tipo de actividades (de tipo más guarrindongo), en otras la chica a pesar de su condición de desventaja, no era precisamente una santa, sino que era perversa y no tenía ningún reparo en hacer el mal, llegando a asesinar a sus torturadoras; en otra, muy sádica, se incluía el hecho de que las hermanastras, para conquistar al príncipe, llegaban a amputarse partes de sus pies para que éstos llegasen a entrar en el famoso zapatito (que originariamente era de cuero, no de cristal). No obstante, como ya he dicho, el autor francés suavizó el contenido violento y macabro del cuento y su adaptación fue la que acabó instaurándose por encima de otras anteriormente existentes; aunque también llegaron los famosos hermanos Grimm e hicieron sus pertinentes aportaciones (concretamente lo del hecho del zapato de cristal). Pero quien, sin lugar a dudas, instauró la visión más recordada y reconocida de la historia, fue el propio Walt Disney.

Cenicienta moviendo el body con el príncipe

A las 12 se jode el hechizo...
Supongo que todo el mundo estará de acuerdo que, cuando uno menciona la palabra "cenicienta", la primera imagen que se nos viene a la cabeza es la de esta versión animada; ese simple hecho ya demuestra la gran valía de esta joya. Yo considero que hasta esa fecha, se trata de la película de Disney con realización más sobresaliente en todos los aspectos. Ver la maravilla de decorados dibujados del castillo, o el diseño de increíble momento en el que el hada madrina le posibilita a Cenicienta el equipo necesario para asistir al baile, mediante la magia, para darse cuenta del asombroso curro del equipo que estaba al frente del proyecto. Así mismo, "La Cenicienta" nos deleita con una gloriosa partitura, y unas canciones inolvidables y también casi mágicas, además de unos magníficos personajes, para mí en este aspecto siempre se llevarán la palma el dueto de ratoncitos Gus y Jack, que sudan la gota gorda por su fidelidad a Cenicienta (divertidísimas las escenas en las que le hacen putadas al malvado felino Lucifer). Para mí es un excelentísimo clásico, un film para grandes y pequeños y desde luego un añorable recuerdo de gran valía, imborrable aunque transcurran años y años.

...y pues, un zapatito de cristal decidirá el destino de nuestra prota

*Como curiosidad, el propio Walt Disney estuvo al frente de un cortometraje animado de 7 minutos, en el que ya contó la historia de "Cenicienta", de ahí que siempre ansiara convertir la historia en uno de sus largos animados. 

Captura del corto de 1922

*MI MOMENTO FAVORITO: las divertidísimas escenas en las que Jack y Gus, putean un poco al cabroncete de Lucifer, siempre con la intención de ayudar a su querida Cenicienta. 

Incordiando un poco a Lucifer

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