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martes, 8 de octubre de 2013

Alien, el octavo pasajero (1979) de Ridley Scott



La tripulación de la Nostromo echando un sueñecito
Recuerdo que cuando vi "Alien" de pequeño me pareció un film muy atrayente, lleno de misterio, de suspense, pero un tanto aburrido y lento, aunque lo que más me decepcionó fue que casi no se ve al monstruo (sus apariciones ante la pantalla pasaban como un destello, salvo contadas ocasiones). Recuerdo que en ese sentido me llevé un trago amargo ya que esperaba encontrarme con un film repleto de acción y más emocionante (ya había visto "Gremlins" y "Critters" y pensaba que la cosa iba por esos derroteros). Pero, poco después vi la segunda parte dirigida por James Cameron, y me quedé flipado. La segunda me pareció infinitamente mejor, con mejores efectos, con mucha más acción, además había más aliens y se veían más (que para mí de aquélla era lo fundamental) y se me hizo 100 veces más entretenida. Mi recuerdo y el cariño que le tengo a esta mítica saga es a raíz de lo que me fascinó su segunda parte, a la que a día de hoy sigo considerando la mejor de todas.


La misteriosa nave estacionada en
el hostil planeta desconocido
Años más tarde volví a ver este "Alien" y me pareció mejor que la primera vez que la vi, tal vez porque como ya entendía toda la historia de la cría de los huevos (que aquí no te la explican) y muchos puntos que te aclaran con el visionado de las dos primeras películas (ésta y la segunda), me resultó un film más ameno y de mayor calidad artística. Al mencionar estos detalles, confío en no desvelar nada nuevo para nadie, supongo que a estas alturas todos Dios, o practicamente todos, más o menos conocen por donde van los tiros del universo "Alien" y si no, pues muy mal, con todas las veces que la han echado por la tele, o con la accedisibilidad que ha propiciado Internet, podría decirse que es casi un delito no haberle echado un vistacillo a esta franquicia tan magnánima. El film nos sitúa en el interior de una nave espacial, la Nostromo. Estamos en el futuro (no podría concretar muy bien el qué año, pero rondando el dos mil y pico supongo) y descubrimos que el espacio se ha convertido en mero lugar de tránsito comercial, así que esta nave hace el mismo oficio que un camión de mercancías por la autopista.

El esqueleto de un gigantesco humanoide. Los diseños de la película
son para quitar el hipo. Una auténtica obra de arte.

¡Cuidado con lo que del huevo asoma!
 De modo que la nave se encuentra en medio de una travesía hacia la Tierra, cuando sus tripulantes (siete concretamente) son despertados (porque van hibernando en sus correspondientes cápsulas) por el ordenador central, el cual les ordena una imprevista misión. Se ha recibido una señal de socorro desde un planeta desconocido y ellos serán los encargados de ir hacia dicho destino para corroborar qué significa esa emisión. Allí va la Nostromo y tres de sus tripulantes descienden de la nave para indagar el terreno, con sus respectivos trajes de astronautas tan chulos. Allí se toparán con una nave abandonada y en su interior un grotesco espectáculo. Pero lo peor, será cuando uno de ellos vuelva con un extraño bicho adherido al rostro. Y bueno chicos, que tampoco voy a contar toda la historia, los que la habéis visto sabéis de sobra lo que pasa y los que no (sorprendentemente los habrá) ¿a qué cojones estáis esperando? Verla de una puñetera vez, que nos o va a morder (digo yo).

¿A que dan ganas de tenerlo como mascota?

La tripulación cree que Kane (John Hurt) ya se
encuentra bien, pero lo peor está por llegar...
No se puede negar. "Alien" es un peliculón desde el punto de vista artístico que resultó la mar de impactante y la mar de novedoso y original. No se puede decir lo mismo del argumento, seamos sinceros "Alien" es un calco casi exacto de dos films anteriores "El terror del espacio exterior" de 1958 (el cual ya comenté aquí) y otro emblemático film de ciencia ficción italiano "Terror en el espacio" de 1965, dirigida por el maestro Mario Bava. No obstante Ridley Scott supo crear un universo increíble, con unos diseños de la nave, el planeta, el monstruo magníficos que le proporcionaron el aplauso del público, gracias a cuyos méritos el señor Scott se posicionó merecidamente en primera línea, como prometedor realizador, el cual hasta día de hoy (en mayor o menor medida) sigue siendo.

Brett (Harry Dean Stanton) en serio peligro

Ash (Ian Holm) no es lo que parecía
No obstante, en lo personal me supone un claro dilema a la hora de verme en la situación de adjudicarle una nota. Doy gran importancia a mis recuerdos de la infancia y si me guiase por ellos "Alien" no hubiese pasado de colocarle un 5 sinceramente. Como ya he dicho, a mí de niño me pareció un film atractivo, misterioso e insólito con grandes dosis de suspense grandes dosis acumulado, pero por otro lado me pareció un film decepcionante y aburrido (vale, de niño no la habría definido así, habría dicho que es un film con cosas guays y otras con cosas menos guays). Además, lo peor de todo. es que no mostraba casi al monstruo que era lo que a mí más me interesaba. En cambio, tiempo atrás en posteriores visionados y ya habiendo visto la grandiosa segunda película de la saga, supe verle la maestría con la que estaba hecho y la cantidad de puntos de originalidad que le impuso a la historia de la ciencia ficción. Además Sigourney Weaver me encanta, es una de mis heroínas favoritas (junto con Jamie Lee Curtis y otras de la época no tan míticas).


Ellen Ripley (Sigourney Weaver)
Guiándome por este juicio y haciendo balance con mis recuerdos de infante mi nota definitiva sería de 8. Visualmente es sobresaliente, sí, como clásico importante del género también, pero desde mi apreciación personal le falta algo de vidilla para llegar al sobresaliente que sí considero que se merece su secuela con todo merecimiento y también lo digo, no tiene un final nada acertado que esté a la altura del clásico que es (puesto que la "pelea" entre la heroína y el bicho malvado es sosa, descafeinada y muy pero que muy simple). Pero bueno, "Alien" es de esas excepciones en las que la maravilla técnica e innovadora que presenta me hace pasar por alto ciertos aspectos que en otro tipo de filmes acribillaría. Además se convirtió en todo un estandarte y una saga importantísima y eso tiene mucho mérito. Desde luego y a pesar de todo es un film imprescindible para los fans de la ciencia ficción, aunque ya lo digo me gusta muchísimo más su prodigiosa secuela, la cual, por lo que veo, siempre tiende a estar infravalorada en detrimento de ésta.

''Échame una mano primo''

*MI MOMENTO FAVORITO: aquél en el que la muerte de Kane (John Hurt) hace posible que conozcamos al octavo pasajero. 

Ha sido un parto difícil

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